Los edificios, más allá de ser espacios físicos, son ecosistemas que se adaptan, evolucionan y transforman los hábitos y costumbres de sus residentes. Por lo tanto, resulta imprescindible que todos los servicios necesarios para su buen funcionamiento y la correcta convivencia de sus habitantes, marchen de forma óptima.
El concepto de ‘facility management’ (FM) responde a dicha necesidad de asegurar y gestionar el mejor funcionamiento de las instalaciones del edificio y sus servicios agrupados, a través del trabajo en conjunto de las personas y las distintas tecnologías, procesos y espacios.
Juan Carlos Cornejo, gerente de Producto, Mantenimiento y Servicios Auxiliares del Grupo EULEN Perú, destaca que “El FM es un servicio que se centra en el mantenimiento eficiente de los edificios, de forma que ofrezcan el mejor valor a los que habitan y/o laboran en el inmueble”. El ejecutivo añade que esta actividad “busca gestionar los activos físicos y la infraestructura de los inmuebles, permitiendo optimizar su vida útil, generando ahorros en costos de mantenimiento, facilitando espacios seguros, cómodos y que impacten positivamente en la de calidad de vida de los propietarios”.
PROPERTY MANAGEMENT
El vivir en edificios tiene algunos beneficios, como las áreas y servicios comunes de las que puede disponer cada propietario y/o arrendador: seguridad, elevadores, áreas de entretenimiento, áreas de coworking, parqueos, entre otros. Para que todo ello sea posible, es necesario que una empresa se ocupe de administrarlos, así nace otro concepto: ´property management’.
Este concepto, que se encuentra muy ligado al ‘facility management’, se orienta hacia los servicios comunes del edificio. Algunas funciones incluyen definir y cobrar el monto de mantenimiento, elaborar y proponer el presupuesto anual de ingresos y gastos ante la Junta de Propietarios, para su aprobación y gestión, así como presentar KPI mensuales sobre los hechos más relevantes de la administración, que pueden ayudar a la toma mejores decisiones.
Ambas especialidades surgen ante la necesidad de integrar los servicios y operaciones derivados de las instalaciones de los inmuebles, siendo hoy, fundamentales en toda estructura empresarial.
1. Productividad y usabilidad. Es decir, velar por el adecuado manejo de los bienes y servicios, tales como mantenimiento menor y mayor, limpieza, y preservación de los equipos y de la propia estructura y elementos arquitectónicos del edificio.
2. Comodidad y seguridad. En ese sentido, garantizar que el edificio resulte cómodo y seguro para sus usuarios. Asimismo, que los edificios, sus equipos e instalaciones sean inspeccionados periódicamente para cumplir con los estándares de seguridad.
3. Sostenibilidad. A través de la gestión de activos lo más ecológica posible. Una línea de acción dirigida a la sostenibilidad ambiental puede basarse en la reducción de los costos, en la optimización de la eficiencia energética o, más en general, en la identificación e introducción de nuevas buenas prácticas.
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