Mi visión es un sueño: que las niñas nativas y campesinas tengan las oportunidades para vivir como prefieran.
Mira: Fact checking a Manuel Merino: ¿Qué dijo sobre la crisis política y el COVID-19?
Discriminamos a las mujeres, además de hacerlo por raza y etnia. Cuando ellas tengan oportunidades y no las discriminen, recién seremos nuestro Perú.
Se requieren instituciones sólidas, políticamente incluyentes, para que la sociedad elija qué quiere y actúe para conseguirlo.
Salvo el Banco Central de Reserva y la Superintendencia de Banca y Seguros, no hay instituciones en políticas públicas. Y ciertamente no hay un solo partido político. Los jóvenes no pueden inscribirse y hacer carrera para llegar a ser candidatos a lo que deseen, exclusivamente por sus méritos, sin discriminación alguna.
La situación es peor. Hay grupos que representan a mafias y mercas privilegiados que tienen incentivos para organizarse, promover la elección pública y conseguir la acción colectiva manipulando y extorsionando.
Googleen mi nombre junto a estos personajes. Los he enfrentado abiertamente. También lo he hecho desde el servicio público cuando he tenido el privilegio de ser funcionario. No ha sido fácil. Le ha costado a mi madre, sobre todo, a la que le dijeron varias veces que yo estaba muerto, por ejemplo. Ha cerrado puertas en mi carrera, principalmente por la “chapa” mentirosa con que algunos me siguen llamando, que me colgaron Castañeda, Kouri y parte del Apra.
Nuestro país es muy especial:
-Acá se asentaron la tercera civilización más antigua del mundo y varias otras.
-Tiene 27 de los 32 climas del mundo.
-Es 1 de los 12 países megadiversos.
Su potencial es inmenso.
Dirigentes de asentamientos humanos, mercados, galerías, directores, profesores y otros sostienen al Perú. Jóvenes marcharon hasta sacar a Merino. No se siente representados, son honestos, son muchos más. Amamos nuestro país.
Tenemos el potencial y somos peruanos de buena fe. Permítanme representarlos. Nunca he tocado S/. 1 suyo. He enfrentado a los corruptos y a mercas privilegiados, sin miedo. No esperen otra cosa: me la seguiré jugando. Cooperaré. Les pido que me permitan representarlos. Hablemos. Estoy a su disposición.