VANESSA ROMO ESPINOZA
Jorge Ignacio Cerbellón Aparicio, cabecilla del clan que enviaba cocaína de alta pureza al extranjero, es una pieza clave para desbaratar organizaciones internacionales de tráfico de drogas.
El coronel César Arévalo Guzmán, jefe de Operaciones de la Dirección Antidrogas de la Policía (Dirandro), confirmó a El Comercio que, debido a ello, la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) enviará a un funcionario para pedir la extradición de Cerbellón a fin de que sea juzgado en el país del norte.
“La DEA quiere extraditar a Cerbellón. Además, los hijos [quienes son parte del clan] son estadounidenses. Él se habría casado con una ciudadana de ese país, pero tiene la nacionalidad peruana. La Embajada de Estados Unidos, a través de la DEA, está ayudando en el caso”, dijo Arévalo.
El jefe policial señaló que la DEA está buscando a quienes recibían el cargamento de droga en Norteamérica. “Parece que estos paquetes de cocaína camuflada en polos de exportación llegaban al estado de Texas”, afirmó.
DETRÁS DEL FINANCISTA
Cerbellón y su familia fueron capturados el jueves en una casa de La Molina con 626 kilos de cocaína. El coronel Arévalo contó que esta droga era de alta pureza, lo que significaba una gran inversión. “Estamos hablando de un 94% de pureza, un nivel que puede llegar a valer hasta US$35 mil el kilo”, dijo.
Como ya se anunció, las operaciones policiales continuarán alrededor de este caso. Esto incluye la detención del financista de esta organización criminal, quien todavía estaría en el país.
“Él tendría doble nacionalidad, tanto argentina como peruana. Es un nexo directo con Estados Unidos”, dijo Arévalo.
La Dirandro confirmó que la droga era traída en buses desde el valle de Pichis Palcazu, en Pasco. Los bloques de droga procesada llegaban a las empresas de fachada que tenía el clan Cerbellón en La Victoria y luego eran trasladados a La Molina para ser empacados.
La Dirandro rastrea al financista de la organización, quien tendría nacionalidad peruana y argentina.
MÁS DATOS
1. La Dirandro descartó alguna relación del clan Cerbellón con cárteles mexicanos. Señaló que el negocio ilegal se hacía exclusivamente con Estados Unidos.
2. De acuerdo con informes policiales, un kilo de cocaína cuesta US$1.000 en las zonas productoras, como el valle de Pichis Palcazu. La Dirandro informa que este clan pagaba hasta US$1.300 para no tener competencia en las transacciones.
3. La policía pone énfasis en lo particular de esta organización por la calidad de droga que enviaba al extranjero y por cómo se protegía para el envío. Los paquetes de cocaína tenían hasta seis capas para evitar la detección.