A un ajuste de cuentas se debería el horrendo crimen ocurrido esta tarde en Los Olivos. Un hombre identificado como Gustavo Adolfo Andrade Briceño, de 38 años, fue quemado vivo en un descampado ubicado en la manzana J, lote 28 de la asociación de vivienda La Estrella, en la urbanización Pro.
Según vecinos de la zona, dos sujetos armados y a bordo de un auto negro habrían traído amarrado y sentado en una silla a la víctima para luego asesinarlo en el terreno vacío.
“Dos hombres altos y con pistolas trajeron al joven. Lo golpearon fuerte, le rociaron combustible y le prendieron fuego”, dijo uno de los residentes a El Comercio, que no quiso identificarse por seguridad.
También aseguraron que el hombre pedía perdón y auxilia mientras las llamas ardían en su cuerpo. “Algunos vecinos ayudaron apagar las llamas con tierra. Se logró, pero quedó ahí. A los 20 minutos, falleció”, acotó otro testigo.
Por su parte, Alfredo Camargo, fiscal de la Segunda Fiscalía de Los Olivos, estableció la hipótesis de una venganza.