Además de periodista, tengo el privilegio de ser profesor universitario. En mis clases suelo usar videos de películas como “En vivo desde Bagdad”, que fue filmada hace 18 años, y de la serie “The Newsroom”, grabada en el 2002, porque a pesar de que no son recientes, desarrollan temas que no han perdido actualidad dentro del ejercicio del periodismo.
Uso libros editados recientemente como “La reinvención de The New York Times”, de Ismael Nafria (2017), pero también algunos clásicos como “Hiroshima” de John Hersey, publicado por primera vez en 1946, así como “El Sha” (1987) y “Un día más con vida” (1976) de Ryszard Kapuscinski. Y este ciclo leeremos con mis alumnos “Frank Sinatra está resfriado”, una célebre pieza periodística, obra de Gay Talese, publicada por primera vez en 1966.
Debo decir que lo mejor que pudo pasarme en el colegio fue llevar el curso de Educación Cívica en secundaria. Teníamos un profesor, don Fidel Peltroche, que en lugar de fomentar el aprendizaje memorista, planteaba diversos temas que debatíamos ardorosamente durante sus clases. Hablábamos de política, de la inflación, del costo de la vida, de nuestros sueños… ¡De qué no debatíamos! Seguramente con argumentos muy candorosos, pero reflexionar sobre temas de nuestra cotidianidad nos permitía darle forma a nuestro pensamiento crítico.
Pese a las barbaridades que se han dicho respecto del documental sobre discriminación lingüística difundido en “Aprendo en casa” –críticas, además, cargadísimas de ideología, justamente de lo mismo que se le acusa al video-, lo positivo es que el tema ha sido puesto en debate. La discriminación lingüística existe y es hora que discutamos al respecto. Y sobre muchos temas más.