El infectólogo del Ministerio de Salud (Minsa), Manuel Espinoza, denunció este miércoles que el 25% del personal médico a nivel nacional usaría su menor esfuerzo para la atención de pacientes en plena pandemia por el COVID-19.
“Aproximadamente son cerca del 25% que están en esas condiciones, es bastante. Es por eso que muchos centros de primer nivel no pueden atender con todas sus capacidades”, declaró el especialista en diálogo con RPP.
El infectólogo Manuel Espinoza expresó su incomodidad e indicó que algunos de ellos están en cuarentena cuando sí podrían trabajar. Además, que otros, pese a tener permiso de descanso, se encuentran laborando en clínicas privadas.
“Hay muchos que están en cuarentena. Muchos de ellos deberían estar trabajando, aducen que tienen una serie de problemas como sobrepeso, que tienen asma leve, pero hay condiciones que en lo que yo manejo que es prevención, control e infecciones, los riesgos están calculados, los riesgos indican que hay personal que deberían tener otro tipo de funciones, pero que pueden trabajar”, declaró.
“Eso ocurre en todo el sector, no solo hablo del Minsa, hablo de Essalud, de fuerzas policiales, defensa, Fuerzas Armadas, hasta en la parte privada. Tengo colegas que trabajan en el sector salud del Minsa, no van a trabajar porque están cuarentenados, pero sí van a las clínicas, no es moral, no es ético y me molesta. Si no quieren trabajar que se jubilen, que se retiren”, añadió.
Asimismo, sostuvo que ha sido testigo de que algunos jóvenes médicos tampoco tendrían voluntad de trabajar de manera adecuada. Espinoza señaló que solo atienden a dos o tres pacientes y se distraen con sus celulares.
“He visto gente muy joven que recién ha egresado de la universidad, que tienen esa forma de pensar, de usar el menor esfuerzo, no quieren trabajar, se limitan a atender a dos o tres pacientes y para con el celular, paran chateando. He visto que, en los centros más críticos del país, ponen personal con muy poca experiencia”, agregó.
Por último, enfatizó que esta falta de vocación por parte de algunos médicos dificultaría una adecuada atención en los hospitales, más aún cuando los casos por COVID-19 se están incrementando en el país.
“También hay mucha gente joven contratada con la modalidad CAS COVID-19 que no hacen el mayor esfuerzo, tienen un sueldo preferencial, están ganando más del doble y trabajan menos, es un problema de gestión de quienes administran esas unidades”, puntualizó.