“¿Están abandonadas? Las veo por varias calles”, decía una publicación realizada en Facebook –hace una semana– por un intrigado vecino que se topó con una de las patinetas eléctricas que se alquilan en San Isidro y Miraflores, y que nadie parecía reclamar. Algunos cibernautas, mejor enterados, se ocuparon de despejar sus dudas en los comentarios.
Pero no se trataba de un vecino distraído. Estas son iniciativas empresariales que acaban de llegar a Lima y que vienen expandiendo su oferta por varias ciudades de Latinoamérica desde el 2018. El negocio consiste en alquilar vehículos de movilidad personal (VMP, por sus siglas en inglés) a usuarios que se trasladan por distancias cortas.
►Municipalidad de Miraflores incauta más de 100 scooters estacionados indebidamente►Scooters en la ciudad, por Angus Laurie
—Iniciativas de movilidad—Movo (aliado con Cabify) y Grin (en alianza con Rappi) son las dos empresas que alquilan estos equipos, los cuales no superan una velocidad de 25 kilómetros por hora. Para encontrarlos, se debe descargar una aplicación móvil que permite localizarlos con GPS en las vías de San Isidro y Miraflores, donde operan a la fecha.
Una vez ubicado el scooter, el usuario debe escanear el código QR (ubicado en el timón) para desbloquearlo. Eso cuesta S/1. De allí en adelante, el uso es sencillo: hay que subir a la patineta, dar unos cuantos impulsos, y luego manipular la manija de aceleración (color verde). Se debe accionar la manija roja para detenerse. Por cada minuto de viaje, Grin cobra S/0,60 y Movo S/0,50.
Un periodista de El Comercio usó esta semana uno de estos scooters. El viaje se realizó desde los alrededores del parque El Olivar, en San Isidro, hasta Larcomar, en Miraflores. Tomó 29 minutos y tuvo un costo de S/17,80. “El principal beneficio –explica el representante en el Perú de Grin, Dusko Kelez– es que este es un servicio limpio y sostenible que no produce emisiones [de dióxido de carbono], porque usa energía eléctrica”.
El urbanista Angus Laurie escribió la semana pasada en este Diario que “en Lima los scooters eléctricos son más sostenibles que un taxi o bus, y definitivamente más divertidos. Sin embargo, como ciudad, sería necesario que existan algunas reglas”.
En Barcelona, en el 2018, una mujer de 90 años murió arrollada por dos jóvenes que recorrían una zona peatonal en un scooter a más de 30 km/h. Fue la primera muerte de un peatón como consecuencia del uso de estos aparatos en España.
El ayuntamiento local había aprobado una norma específica en el 2017, que permitía que los aparatos circularan por zonas peatonales y veredas siempre y cuando no superaran los 20 km/h. También podían ir por ciclovías y calles donde la velocidad máxima era de 30 km/h. En Madrid, está prohibido el tránsito por las veredas.
—Sin regulación—Según el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, en el Perú no hay regulación vigente para el uso de VMP (scooters eléctricos, skates eléctricos o segways). “La Dirección de Políticas y Normas en Transporte Vial viene analizando la regulación de las formas y modos de uso que deben tener los VMP. Es importante establecer cómo y por dónde deberían circular, considerando las velocidades y dimensiones que presentan. En otros países, ya se encuentran regulados y se alquilan solo a mayores de edad”, explicó el MTC.
Tanto la comuna de Miraflores como la de San Isidro informaron que preparan ordenanzas que especifiquen las zonas de circulación, velocidades y espacios para el estacionamiento de los scooters en las calles. “Hemos visto que los están dejando abandonados en la vía pública y obstaculizando a los peatones [...] También vemos que están circulando por las veredas y es un peligro”, cuenta el gerente de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente de Miraflores, Carlos Ramírez. El miércoles último, el municipio miraflorino incautó 145 de estos aparatos por haber sido estacionados indebidamente en vías públicas del distrito. “Con esta medida preventiva se busca evitar accidentes, en vista de la alta velocidad con la cual circulan estos vehículos”, anunció la comuna. Ayer, en un comunicado, añadieron: “El municipio no está en contra de los scooters [...] ¡Bienvenida la modernidad, pero sin caos, desorden ni peligros!”.
En San Isidro, el gerente de Sostenibilidad, Jorge Piana, aseguró que las empresas Movo y Grin ya firmaron un acta de 14 compromisos. Se acordó que los scooters no circulen por las veredas, los usuarios usen cascos, los aparatos no sean usados bajo los efectos del alcohol o cualquier droga, no sean estacionados bloqueando el paso de peatones y la velocidad máxima de circulación sea de 25 km/h.
Grin cuenta con un seguro para sus usuarios y terceros en casos de accidente, dijo Kelez, quien precisó que en una semana de operaciones ininterrumpidas no se han reportado accidentes en más de 18 mil viajes realizados con mil scooters operativos. El Comercio buscó a representantes de Movo, pero no fue posible contactarlos.“Estamos informando a nuestros usuarios –contó Kelez–que solo deben circular por las ciclovías y por el lado derecho de la pista en el sentido del tránsito. Además, estamos regalando cascos a nuestros usuarios frecuentes [...] La otra semana empezaremos a operar en San Borja, y la idea es llegar a otras zonas de la ciudad”.