“La gente como tú solo escucha partecitas, y con esos pedacitos pretende entender cómo son las cosas, cómo es la realidad (…) y tan tranquilos se ponen a descifrar la realidad y escriben tomos olvidándose que solo conocen fragmentos. Fragmentos de relatos”. Esto sentencia uno de los personajes de “El año del viento”, reciente novela de Karina Pacheco (Cusco, 1969). La cita podría servir de poética para su obra, una de las más singulares de la narrativa peruana contemporánea. En efecto: los mejores libros de Pacheco -”La voluntad del molle” (2006) y “Las orillas del aire” (2017)-, son sagaces investigaciones emotivas acerca de destinos que han sido fagocitados por una memoria ambigua y sesgada. Sus protagonistas se deciden un buen día a romper el silencio cómplice que los rodea e indagan con resolución en zonas oscuras y hasta hostiles con el propósito de subvertir los relatos familiares que justificaban el machismo, el racismo y la desaparición forzada.
LEE TAMBIÉN: Karina Pacheco: “Pese a nuestras tragedias, creo que este país tiene buena raíz”
“El año del viento” vuelve a trasuntar esos derroteros marcados por confrontaciones introspectivas, pesquisas engañosas y encuentros tan insólitos como iluminadores. Una tarde Nina, escritora cusqueña residente en Madrid, coincide en un mercado con una mujer exacta a su prima mayor Bárbara, de la que no tenía noticia desde casi cuatro décadas. Ella le responde que “Bárbara está muerta” y se niega a decirle nada más. El extraño incidente provoca que Nina se embarque en los recuerdos de cuando ambas vivían en el convulso Cusco de principios de los años ochenta, urbe acosada por la represión policial y la demencia de Sendero Luminoso. Mientras Nina disfrutaba la alegría de la niñez -su obsesión es patinar por las plazas de la ciudad-, Bárbara se involucraba con grupos radicales de izquierda. Un buen día se esfuma sin dejar señal. La versión de la familia es que viajó a Brasil para estudiar. Pero Nina, gracias a ciertos informantes a los que acude, descubre que la verdad sobre su paradero es mucho más compleja y estremecedora.
Aunque “La voluntad del molle” y “Las orillas del aire”, son títulos maduros y bien construidos, podemos reprocharles en ocasiones una actitud didáctica que torna agrestes algunos pasajes, además de eventuales dificultades para otorgar fluidez a ciertos tramos cuyos problemas narrativos quedaban a medio resolver. Esta novela, en cambio, se presenta limpia de dichos inconvenientes. Pacheco ha consolidado una acabada soltura expresiva de la que ya había dado muestras en su excelente “Lluvia”, libro de cuentos facturado con un lirismo sobrio y sugerente que sabía dar voz al silencio y corporeidad a la incertidumbre.
Aquí esa destreza se manifiesta en diferentes recursos, como el de complementar atinadamente los hallazgos y los vacíos de la investigación con la remembranza de leyendas ancestrales enhebradas a referencias a la cultura popular (específicamente, los éxitos cinematográficos ochenteros que Nina y Bárbara consumían juntas). Nuestra autora sostiene a lo largo de esta ficción un flujo de resonancias míticas y vivenciales, datos históricos y testimonios por donde el lector se desliza sin obstáculos. A esto contribuye una intriga dosificada de tal manera que no permite la irrupción de tiempos muertos ni de reflexiones que pueden ser valiosas en sí mismas, pero poco útiles para el discurrir de lo contado.
Sin embargo, el máximo logro de “El año del viento” es el inolvidable personaje de la enérgica, dulce e inteligentísima Bárbara, símbolo de una juventud inquieta que no se arredra ante la injusticia y lucha por un futuro digno contra “este puto país” desigual y cruel con los más débiles. Pacheco consigue infundirle una humanidad sin puntos ciegos: podemos verla, escucharla, percibir su aliento entre furioso y benefactor. En sus novelas anteriores había exhibido enjundia para construir actores femeninos creíbles y de personalidades fuertes, aunque ninguna llega a redondear la poderosa figura de esta bella muchacha inaccesible.
Dentro del universo de la literatura de la violencia política, esta novela de Karina Pacheco rehúye los habituales vicios de esa corriente: los disfuerzos del dogmatismo ideológico, la enumeración de efectistas catálogos de cadáveres, la caricatura que secciona el mundo entre héroes positivos y sádicos irremisibles. Su mirada es honesta, verosímil e integral, como las buenas ficciones que permanecen y crecen en el lector.
La ficha
Autora: Karina Pacheco
Título: “El año del viento”.
Editorial: Planeta
Año: 2021
Páginas: 357
Relación con la autora: cordial
Valoración
4 estrellas de 5 posibles
Lee también
- Alfabetización digital y combatir la desinformación: los retos que asume la nueva jefa de la Biblioteca Nacional, Fabiola Vergara
- El duro mensaje para los poetas de Facebook por parte de Enrique Sánchez Hernani
- “Este diario llega gracias al gentil auspicio de Wuhan”: el libro que reflexiona sobre el confinamiento en Perú
- Anne Rice, autora de “Entrevista con el vampiro”, falleció a los 80 años
- Patricia Castro Obando: “La mujer hakka tenía que cumplir los mismos roles que los hombres” | ENTREVISTA