“La poción de la verdad”, la obra que muestra los efectos de la burundanga

¿Hasta dónde llegaríamos por conseguir la verdad? Para algunos, la opción más rápida aparece en forma de diversas plantas como la belladona, el beleño, la mandrágora y la datura, que al ser purificadas y concentradas en forma líquida, o en polvo, se convierten en una peligrosa droga llamada escopolamina, popularmente conocida como burundanga y en el mundo delictivo como el aliento del diablo.

“Varios personajes de esta obra buscan la verdad sin importarles el precio. Son capaces de beber esta poción, aunque tengan que enfrentarse a verdades que pueden herirlos emocionalmente y también físicamente, porque al final lo que están tomando es algo que puede matarlos”, comenta Andrea Luna, quien interpreta a Silvia, compañera de cuarto y amiga de Berta. Al descubrir que su amiga está embarazada de su novio Manuel, esta le ofrece una pócima que revelará si realmente él quiere tener un hijo con ella. Esta decisión, además de revelar las intenciones de Manuel, desencadenará una serie de descubrimientos sobre la oscura vida secreta de su pareja.

Jennifer Aguirre Woytkowski, quien junto a Andrea Luna realizó la obra testimonial “La manada”, apostó esta vez por una comedia del reconocido dramaturgo español Jordi Galcerán, reuniendo a actores nacionales como Jesús Neyra, Fabiola Vargas, Andrea Luna, Pedro Olórtegui y Bernardo Scerpella, para encarnar a personajes que parecen interpretar una sitcom con momentos de donde la tensión parece superar los momentos divertidos.

“Esto recuerda a una obra de Cattone, es como una comedia de enredos llevada al límite, aunque si comparamos, la dirección ambos casos son diferentes. Osvaldo era más histriónico, actuando él mismo para que lo hagas parecido, en cambio aquí Jennifer nos permite jugar entre los actores para descubrir cosas nuevas”, cuenta Luna.

La burundanga, también conocida como “polvo zombi”, puede generar efectos muy peligrosos para quienes la consumen, llegando incluso a provocar alucinaciones y, en dosis muy elevadas, la muerte. Llevarla al teatro es una forma de evidenciar este tipo de “pociones” existentes en la realidad, y presentarla en una comedia es una manera de mostrar sus peligros de forma más amena.

“Habla de la corrupción y de muchas otras cosas a través de la comedia. Uno puede reírse, pero también pensar que te están contando una historia muy fuerte, donde aparecen temas que no se toman a la ligera y personas que toman decisiones reflejo de lo que ocurre en la realidad”, cuenta Luna.

Para traer esta obra de España a Perú, donde se mantuvo por doce años ininterrumpidos en cartelera, era necesario realizar ciertos ajustes, especialmente en Sudamérica, lugar donde se detectas decenas de casos por año ligados a esta sustancia. “Pedimos autorización al dramaturgo para cambiar el nombre original ‘Burundanga’ por ‘La poción de la verdad’, a fin de evitar que se la relacionara con los diversos casos a los que está asociada esta droga, como violaciones, robos, secuestros y otras actividades delictivas”, explica Luna.

La obra se presentará en el Teatro de Lucía a partir del 8 de febrero, donde se podrá apreciar esta comedia que busca generar conciencia sobre los efectos de estas drogas y las consecuencias negativas de decisiones tomadas con el afán de descubrir la verdad. “Además de lo físico, para un actor sería fatal tomarla, al igual que para cualquiera. Todos tenemos verdades que no queremos que se sepan”, concluye.