Para la ciencia, la presencia de agua es sinónimo de vida, al menos en forma de bacterias; sin embargo, un grupo de científicos podría haber encontrado un lugar en nuestro planeta en donde, pese a que hay líquido, no hay señales de organismos vivos.
Se trata de las fuentes termales del volcán Dallol, en el desierto de Danakil, en Etiopía, lugar que es conocido por ser uno de los entornos más peligrosos e inhóspitos de la Tierra.
Desde cierta distancia, el complejo parece ser muy vistoso por los lagos hiperacídicos con aguas hipersalinas de color verde, amarillo y naranja, pero se sabe que es un área extremadamente hostil de donde emanan nubes de gas tóxico que provienen de un volcán que yace bajo la superficie.
Según un nuevo estudio publicado en la revista Nature, en el que expertos recopilaron muestras en cuatro zonas diferentes del desierto, se hallaron pistas falsas de vida debido a que la mayoría estaban relacionadas con "contaminantes de laboratorio". Otros eran bacterias introducidas por humanos durante expediciones y visitas turísticas.
"Identificamos dos barreras fisicoquímicas principales que impiden que la vida prospere en presencia de agua líquida en la Tierra y, potencialmente, en otros lugares", explicaron, refiriéndose a que la presencia de agua en un planeta no necesariamente significa habitabilidad..
Estas barreras son un alto nivel de magnesio, que es capaz de destruir cualquier tipo de formación celular, y la segunda una combinación mortal de hiperacidez e hipersalinidad, donde las adaptaciones moleculares simultáneas a un pH demasiado alto y bajo son imposibles.
Mientras nuevos estudios no demuestren lo contrario, las fuentes termales del volcán Dallol seguirán siendo un lugar incapaz de albergar vida, según los científicos.
Mira en YouTube cómo luce el complejo geotérmico: