A finales del 2020, Rafael Amaya sorprendió a propios y extraños al anunciar que se encontraba en rehabilitación a causa de sus adicciones al alcohol y las drogas. El actor de ‘El señor de los cielos’ se había ausentado de la vida pública y por mucho tiempo vivió escondiéndose de sus familiares, amigos y de sus seguidores. Sin embargo, llegó un momento que se sintió en el fondo de hoyo, así que le pidió ayuda a su compadre, el cantante Roberto Tapia.
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Es así que Tapia junto a la hermana del actor y su manager crearon todo un plan para rescatarlo. Así que con engaños lo llevaron al centro de rehabilitación Julio César Chávez y en su momento, el exboxeador reveló que el actor llegó en un estado psicótico y seguía creyéndose ‘El señor de los cielos’.
Fueron cuatro meses los que el actor estuvo internado luchando contra sus demonios y sin duda, ha tenido un gran avance y a poco días de haber abandonado la clínica de rehabilitación, fue el boxeador Julio César Chávez Jr. quien reveló cómo se concretó este proceso.
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EL PROCESO QUE SIGUIÓ RAFAEL AMAYA PARA SUPERAR SUS ADICCIONES
El hijo del pugilista Julio César Chávez destacó que la rehabilitación de Rafael Amaya se logró porque se decidió a ingresar a la clínica Baja del Sol en Culiacán, Sinaloa, así como a su interés por superar este trago amargo.
En entrevista con Suelta la Sopa, el deportista que ha estado muy cerca del actor, detalló las razones por las que funcionó el tratamiento del actor que dio vida a “Aurelio Casillas” en El Señor de los cielos, la exitosa serie de Telemundo.
“Sí, ha sido una buena opción (ingresar a la clínica de Julio César Chávez), pero sobre todo las ganas de él, la disposición y la humildad”, comentó.
El pugilista resaltó que otros factores importantes en la rehabilitación de Amaya fueron su presencia y la de su padre, el consagrado ex boxeador Julio César Chávez, quien es el dueño de las clínicas de rehabilitación Baja del Sol.
Aprovechó para asegurar que si el actor pudo salir del bache en el que se encontraba “todo mundo puede”.
El histrión de 43 años salió del centro de rehabilitación el pasado 22 de diciembre, fecha desde la que está en compañía de sus padres en Culiacán, Sinaloa, con quienes celebró las fiestas decembrinas. También estuvo en compañía de su gran amigo y promotor de su recuperación, el cantante Roberto Tapia.