Una mujer decidió viajar 1.151 millas (más de 1850 km) para encontrarse con un hombre con el que había estado hablando durante tres años; sin embargo, las cosas dieron un giro justo en el momento en que debían reunirse. River Blake, una modelo de 23 años de Luisiana, Estados Unidos, hizo un viaje largo hasta Rapid City, Dakota del Sur, después de que su “cita” pagara el tramo de ida. Cuando llegó, se encontró sola y con una deuda inesperada, ya que tuvo que cubrir el alojamiento de una noche y el vuelo de regreso.
Después de empezar a hablar por mensajes directos en 2019, River estaba convencida de que había encontrado a alguien con quien tenía mucho en común, incluso a pesar de vivir en diferentes estados.
Se comunicaron durante cinco años y compartieron una conexión aparentemente sólida, pero la joven notó que su relación era un tanto irregular debido a la distancia. A pesar de esto, el hombre con el que intercambiaba mensajes decidió llevar las cosas al siguiente nivel: la invitó a vivir con él, prometiéndole un futuro juntos.
El 17 de febrero de 2024, River partió hacia Rapid City con la esperanza de comenzar una nueva vida; no obstante al llegar, las cosas no se dieron de la forma esperada cuando se dio la mujer se dio cuenta de de que su “cita” no tenía intención de encontrarse con ella.
“Pasé de tres a cuatro horas en el aeropuerto corriendo en círculos y cuando me di cuenta de que no vendría a buscarme, me fui”, dijo en conversación con el medio SWNS.
“Reservé un Hilton por dos noches, conocí a un chico agradable a través de un amigo y me mostró la ciudad. Definitivamente todavía me duele, realmente me molestó, pero al menos pude hacer un poco de turismo”, agregó.
Gastó más de mil dólares para volver a su hogar
La joven esperó al hombre varias horas, antes de tener que pagar 290 dólares para pasar una noche en el hotel Hilton. Además, pasó toda la mañana siguiente sentada en el aeropuerto, esperando a su vuelo (por el que pagó mil dólares) que la haría regresar a su hogar.
Aunque la situación fue incómoda y difícil de aceptar, River mantiene una actitud positiva y ahora solo piensa enfocarse en ella misma y en disfrutar su tiempo conociendo el mundo.
A modo de reflexión, dijo: “Soy un firme creyente de que todo pasa por una razón. Simplemente este no era mi momento y, después de todo, él no era mi persona”.
“Ahora sólo me estoy concentrando en mi carrera y pasando todo el tiempo que puedo viajando”, concluyó.