Durante años, James Harris Jr. de Glen Burnie, Maryland, y Russ Redhead de Lancaster, Pensilvania, eran conocidos como rivales en torneos de billar de alto nivel. Se enfrentaron en un torneo de la Asociación Estadounidense de Jugadores de Pool hace aproximadamente una década en The Bank Shot Bar & Grill en Maryland. En aquel entonces, competían por un premio mayor: un viaje a Las Vegas con todos los gastos pagados y la oportunidad de participar por un premio aún mayor.
Después de perder ante Harris, Redhead expresó su frustración en una publicación en Facebook, pero luego de recibir comentarios de amigos en común que defendían a Harris, Redhead eliminó la publicación y se disculpó.
Con el tiempo, Redhead reconoció que Harris era en realidad una buena persona y comenzaron a pasar más tiempo juntos, yendo a torneos y compartiendo apuestas.
“Y, ya sabes, íbamos juntos a otros torneos, apostábamos juntos por personas y cosas así... así que realmente comenzamos a unirnos [a partir de] ahí”, reveló el hombre en conversación con Good Morning America.
En 2020, Harris, afectado por una enfermedad renal tras contraer covid-19, fue informado de que necesitaba diálisis debido a una insuficiencia renal completa.
“No sabía que la diálisis significa automáticamente... insuficiencia renal, lo que significa que los riñones ya no funcionan. Eso significa que usted necesita un trasplante, pero no le provocan todo eso de una vez”, recordó el estadounidense.
Su esposa aceptó ser su donante, pero no eran compatibles
Después de ser incluido en la lista de espera de trasplantes del Centro Médico de la Universidad de Maryland (UNMMC), su esposa, Denise, se ofreció como voluntaria para donarle un riñón. Aunque no resultó ser compatible, Denise participó en un programa educativo sobre trasplantes para buscar donantes vivos.
En noviembre de 2022, mientras salían juntos a un torneo de billar, Denise compartió la historia de la salud de su esposo con Redhead. Conmovido por la situación, su antiguo “enemigo del billar” se ofreció a donar un riñón.
“Después de que ella me dijo todas las cosas que necesitas para ser donante, la miré y dije: ‘Bueno, lo haré’”, dijo el buen samaritano.
Después de una serie de pruebas que confirmaron que era un donante compatible, Redhead y Harris se sometieron a un trasplante exitoso el 8 de febrero de 2024 en UMMC.
Un mes después del procedimiento, el Dr. Richard Ugarte, quien ayudó a administrar la atención de Harris, informó que la recuperación se llevó a cabo sin inconvenientes.
Redhead reflexionó sobre su decisión de donar su riñón, diciendo que era lo correcto. Para él, la posibilidad de salvar una vida sin cambios significativos en la suya era una oportunidad que no podía dejar pasar.
“Alguien necesitaba mi riñón para salvar su vida. Y si puedo hacerlo sin ningún cambio real en mi cuerpo y mi vida, quiero decir, ¿por qué no?”, concluyó.