El gato negro de nombre Dex llevaba varios días vagabundeando por Fort Plain, una villa ubicada en el condado Montgomery, en Nueva York (Estados Unidos). Cuando un hombre decidió llevarlo a un refugio para saber si tenía dueño. Allí, comprobaron que el felino llevaba puesto un microchip que arrojó que su hogar estaba a más de 300 kilómetros de distancia. ¿Cómo fue que llegó allí? Ni siquiera los especialistas han encontrado respuesta del caso.
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¿Cómo llegó Dex llegar desde Pensilvania hasta Nueva York? Pues nadie lo sabe. Rápidamente, los responsables del albergue se pusieron en contacto con los dueños del felino, que demostraron su felicidad al encontrar, por fin, a su mascota a la que le habían perdido la pista hace tres meses.
La historia del pequeño felino fue compartida a través de Facebook por el propio refugio del condado de Montgomery. ¿La razón? Para concientizar a los dueños sobre la importancia de implantar microchips a sus mascotas para poder identificarlas. “Gracias a estos chips se han recuperado mascotas después de muchos meses y a cientos de kilómetros de distancia”.
Dex tuvo una nueva oportunidad y gracias al rescate oportuno de un amante de los animales logró reencontrarse con sus seres queridos. El feliz desenlace de esta historia se pudo conocer gracias a las fotografías publicadas por el albergue que recibió al pequeño felino.
¿Por qué ponerle un chip a tu gato?
Desde asustarse y salir corriendo hasta desorientarse o distraerse en un nuevo entorno son algunas de las razones por las que tu gato puede desaparecer. Es por que se recomienda la implantación de un chip para ubicarlo. Se trata de un procedimiento simple, rápido y sin dolor para tu minino efectuado por un veterinario, que se encargará de colocarlo debajo de la piel de tu mascota.
El microchip para gatos es del tamaño de un grano de arroz y una vez que en su lugar, el minino ni lo sentirá. El chip tiene un código único, que se registra en una base de datos, y el dueño deberá proporcionar su nombre, dirección y número de teléfono de emergencia. El dispositivo también incluye los datos de tu gato como el registro de vacunas y si está o no esterilizado, reporta Purina.
¿Cuándo poner chip a un gato?
Dependiendo de la raza y tamaño, a la mayoría de los gatos se les puede colocar el microchip desde las 10-12 semanas en adelante. Algunos criadores entregan al gato con su microchip o brindan opciones de este servicio, añade Purina. Nuevamente, la ventaja de ponerle un chip a tu minino es que en caso de que se extravíe, podrás encontrarlo con facilidad.