HISTORIA VIRAL | El sargento Matthew Robinson adoptó a Cooper. (Foto: Hampton Police Department)
HISTORIA VIRAL | El sargento Matthew Robinson adoptó a Cooper. (Foto: Hampton Police Department)
Oscar Guerrero Tello

Copper es un perro bastante afortunado después de que un oficial de la policía de New Hampshire lo recogiera hace unas semanas cuando lo encontró merodeando en un estacionamiento cerca de la estación de la policía. La historia del can que terminó siendo adoptado por una agente es viral en las redes sociales.

El perro fue encontrado en Hampton, New Hampshire, Estados Unidos (USA) , a unas 45 millas al noreste de Boston. Era temprano en la mañana del 6 de julio, según el capitán de la policía de Hampton, Anthony Azarian, cuando el cachorro fue visto perdido, merodeando por el estacionamiento municipal adyacente a la estación de policía. El detective lo recogió y lo llevó a la comisaría.

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Según Azarian, llevar perros callejeros a la comisaría no es una rareza. Cuando los oficiales notan un perro solo sin signos de un dueño cerca, a menudo piensan que es la mascota de un residente que se ha ido. Las personas que buscan a sus animales perdidos generalmente pasan por el Departamento de Policía y si el perro ya está en la estación, el dueño y la mascota pueden reunirse rápidamente. “Eso no sucedería esta vez”, dijo Azarian.

Perro limpio y revisado por veterinario

Una vez en la estación, el cachorro pasó la noche siendo visitado por oficiales del turno de medianoche en el centro de despacho, donde trabajaba la detective Harlee Felch. Notó que el cachorro era amigable, pero delgado y no lucía saludable. Entonces ella le dio una buena comida de pollo y arroz, luego se puso a peinar algunas plagas desagradables.

“La detective Felch notó que tenía garrapatas y se las quitó”, dijo Azarian. “Parecía desnutrido; había signos de abandono. El detective Felch inicialmente lo nombró Outcast. Lo mantuvimos durante la noche en despacho, y al día siguiente, Anthony Palmisano , nuestro oficial de control de animales, lo llevó al veterinario”.

En Health and Wellness Animal Hospital en Hampton Falls, el cachorro fue revisado. Lo limpiaron, dijo Azarian, recibió todas sus vacunas, fue examinado y tratado por cualquier cosa que afectara su salud, y se estimó que el perro tenía alrededor de siete meses. Se quedó allí durante aproximadamente una semana.

No se puede reunir con el propietario

Mientras tanto, en la estación, los detectives intentaron reunir al perro con su dueño, según Azarian, pero no lograron facilitar esa reunión. Después de investigar y encontrar un número de teléfono del dueño, la policía determinó que el dueño vivía a varios estados de distancia y que optó por no regresar por el cachorro.

Ahora, el nombre Outcast parecía aún más apropiado, pero no por mucho tiempo. “El detective que encontró al perro accedió a cuidarlo hasta que pudiera ser adoptado”, dijo Azarian. “Y lo traía a la estación, así que todos lo conocíamos”.

Estar con Outcast no es un deber difícil, según Azarian, casi todos los que entraron en contacto con el cachorro se encariñaron. “Es amigable, un gran perro”, dijo Azarian. “Es el tipo de perro que puedes abrazar”.

Encontrar un hogar para siempre

En muy poco tiempo, Outcast tenía buenas perspectivas para su hogar para siempre con Hampton Sgt. Matthew Robinson, quien había desarrollado una debilidad la primera vez que se encontraron en el centro de despacho. El sargento de guardia del turno de medianoche, Robinson, estaba en la estación la noche en que llegó el perro. Cuando supo que Outcast necesitaba un hogar permanente, dio un paso al frente.

“En marzo adopté a Denver, un perro callejero de Aruba”, dijo Robinson. “Tienen más o menos la misma edad e incluso se parecen. Lo traje a casa para ver si se llevaba bien con Denver, y se llevaban muy bien; juegan juntos todo el día”.

En cuanto a cómo Outcast llegó a ser Copper, el nombre perfecto para el canino de confianza de un oficial de policía, esa casualidad vino del oficial Haley Magee, dijo Robinson.

“Me encanta el nombre; Me encanta el juego de palabras”, dijo Robinson. “Y me gustaría agradecer a todas las personas que ayudaron con Copper, incluido el detective que lo encontró. Y el oficial Magee ha estado cuidando perros mientras yo estoy en el trabajo, y los despachadores han ayudado a cuidarlo. Todos aquí han sido de gran ayuda porque todos estamos haciendo mucho tiempo extra”.

Pasar de ser un perro callejero descuidado, hambriento e infestado de garrapatas que deambula por las calles de Hampton Beach, a ser una mascota amada por los oficiales de policía de Hampton está muy lejos de lo que podría haber terminado tristemente para el cachorro.

En cambio, como publicó el jefe de policía Alex Reno en Facebook: “Damas y caballeros, saluden al miembro más nuevo de la familia del Departamento de Policía de Hampton… ¡Cooper!”.

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