James Hong podría ser considerado el actor que mayor participación ha tenido a lo largo de la historia de Hollywood, al haber estado en más de 600 películas y series. Aunque, actualmente puede jactarse de ser el personaje más prolífico en la industria del cine, el camino para llegar hasta donde se encuentra fue muy complicado debido a que su padre y abuelo eran chinos, y no veían con buenos ojos que integre el mundo de la actuación.
“Bueno, ya sabes, los padres chinos quieren que hagas algunos trabajos profesionales en lugar de ser actor. Ser actor es como el último peldaño en la escalera de las profesiones. Ni siquiera lo llaman profesión porque era vergonzoso demostrar tus sentimientos frente a una audiencia”, señaló en una entrevista que publicó CNN.
APASIONADO EN LA ACTUACIÓN DESDE QUE ERA NIÑO
Pese a la falta de apoyo de su familia, él continuó con sus estudios en la escuela, pero no quería dejar de lado su pasión, algo que despertó más cuando vio a varios artistas en la tienda de hierbas de su padre en Minnesota.
“Todos los lavanderos de Minneapolis no tenían nada que hacer los fines de semana, por lo que se reunían en la tienda de mi padre. Recuerdo eso porque teníamos esos pequeños taburetes de madera y todos se reunían allí, y contrataron a estas personas de ópera chinas de San Francisco para que vinieran y ejecutaran sus actos. Yo era sólo un niño pequeño y los miraba con ojos muy abiertos. ¡Guau! ¡Qué profesión!”, manifestó.
COMPLACE A SU FAMILIA
Hong, ya todo un joven, decidió complacer a sus padres y estudiar Ingeniería Civil en la Universidad del Sur de California, donde se graduó y comenzó a trabajar en la construcción de carreteras en Los Ángeles, durante siete años.
Más tarde, al estar convencido de que ser ingeniero no era lo suyo, optó inclinarse por la actuación, estudiando nada más y nada menos que con Jeff Corey, actor, director y respetado profesor de arte dramático. Mientras ejercía su profesión, también buscó trabajo como actor o comediante, algo que finalmente hizo durante sus vacaciones.
LA OPORTUNIDAD LLEGÓ
Aunque sabe que su carrera en el mundo del entretenimiento comenzó en los años cincuenta haciendo el doblaje de las bandas sonoras de varias películas asiáticas, así como el redoblaje de los personajes Ogata y el Dr. Serizawa, en la película japonesa “Godzilla, rey de los monstruos” (1956) y en “El vapor humano”; recuerda con nostalgia cómo llegó su primera oportunidad.
El gran salto se dio cuando estuvo en el programa de televisión “You Bet Your Life”. “Hice imitaciones de Groucho Marx, James Cagney y demás”, contó James Hong, quien no imaginó que su presencia iba resultar todo un éxito, iniciándose de esta forma su carrera en Hollywood.
“De repente, querían que yo estuviera en una película. Esa película fue ‘Soldier of Fortune’ (un filme de 1955. Fue una experiencia que nunca olvidé porque actué con Clark Gable. Luego, justo después, obtuve mi tarjeta de sindicato y comencé una tras otra. Tuve que dejar la ingeniería civil”, indicó.
Luego de ello actuó junto a John Wayne, William Holden, Jennifer Jones, Keanu Reeves, entre otras personalidades.
Pero no solo eso, ya que le dio vida con su voz a Mr. Ping en “Kung Fu Panda” y a Chi-Fu en “Mulán”; además de haber estado en televisión en diversas series.
Debido a su constante trabajo, este personaje tiene más de 600 créditos a su nombre. De acuerdo con su perfil de IMDB, Hong tiene 469 créditos en televisión, 149 largometrajes, 32 cortometrajes y 22 videojuegos, haciendo un total de 672 créditos.
ESTEREOTIPOS CONTRA LOS CHINOS
En la entrevista, el actor lamentó que en todas las películas, los asiáticos fueran considerados el “relleno” de un elenco o debían representar papeles menores que se dedican al consumo de opio y las prostitutas. En el caso de tener mayor protagonismo, los personajes debían ser otros.
“Cualquier otra película que exigía un liderazgo asiático, la mayor parte del tiempo fue interpretada por actores caucásicos con los ojos cerrados y los dientes pequeños. Terminé los primeros años de mi carrera interpretando principalmente a lavanderos o perseguí a chinos. Fue difícil, muy difícil salir del molde”, indicó.
Rememoró cómo en “Las nuevas aventuras de Charlie Chan”, donde tuvo un papel secundario, el protagonista era el actor irlandés estadounidense J. Carrol Naish por sus rasos orientales.
A pesar de estas limitaciones, continuó desempeñándose de la mejor manera, aunque hizo saber su malestar. Como no fue escuchado, él junto al actor Mako Iwamatsu emprendieron su propia compañía de teatro, todo constituido por personas orientales, siendo su primera producción “Rashomon”.
“Eso hizo que la industria se diera cuenta de quiénes éramos. No éramos sólo extras, o personas que engañaban. Estábamos en una obra de teatro que organizamos. Fuimos los protagonistas principales, fuimos los actores y llamamos la atención”, aseveró.
Ese grupo de actuación se convirtió en el legendario grupo de teatro East West Players.
A sus 91 años, James Hong asegura que seguirá en los escenarios hasta que su cuerpo lo permita. “Podría jubilarme con mi pensión (del Screen Actors Guild) e ir a Europa y hacer giras, e India, pero algo dentro de mí, dentro de James Hong, quiere seguir adelante y hacer más películas y progresar. Voy a hacer otras películas hasta que no pueda caminar más y no pueda hablar más”, finalizó.