Cuando una persona regresa de viaje lo último que quiere escuchar es temas de trabajo o de estudios, ya que su cerebro todavía sigue procesando los momentos vividos durante sus vacaciones. Sin embargo, es necesario hacerlo para adaptarse a la rutina de siempre y, por supuesto, sacar las prendas de la maleta para tener listo la ropa.
Esto no debería ser un problema puesto que el procedimiento es muy sencillo: sacudir la ropa y meterla a la lavadora. Pero ¿qué pasa si entre tus prendas encuentras a una tarántula de 12 centímetros? Sí, esto es poco probable que ocurra, pero siempre existe una posibilidad de que pase y este ciudadano británico puede dar fe de ello.
James Mugridge, de 31 años, nunca imaginó encontrar una enorme tarántula en sus jeans después de unas merecidas vacaciones en México. Se cree que el animal es una rabadilla roja mexicana, una araña excavadora que habita en la jungla y se distingue por los pelos rojos en su abdomen.
El residente de Exeter, Inglaterra, recién hizo este hallazgo al desempacar luego de dos semanas por tierras aztecas. Grande fue la sorpresa que se llevó al ver un ejemplar de Tliltocatl vagans que, por lo general, es dócil y su picadura no es mortal para los humanos.
Según SWNS, el hombre gritó y soltó un gran aullido cuando vio las piernas peludas que salían de sus pantalones. Ante ello, no le quedó de otra que armarse de valor para sacarla cuidadosamente, pero había un detalle que le llamó la atención.
Le devolvió el alma al cuerpo
Cuando retiró al animal con unos palillos, el joven se percató que la enorme tarántula ya estaba muerta, y cree que debe haberse congelado en la bodega del avión en su viaje de retorno desde Cancún.
“Por una fracción de segundo pensé que estaba vivo, ¡dejé escapar un grito!”, precisó.
El consultor de negocios, quien viajó a México con su novia el pasado 15 de abril, indicó que vieron varias tarántulas durante el camino hasta Tulum, pero hubo una que quiso “conocer” el Reino Unido al camuflarse entre sus prendas, como así lo recuerda de forma irónica.
“Dicho esto, estaba absolutamente aterrorizado cuando vi que la pequeña cosa se había metido en mis jeans. Realmente era lo último que esperaba”, finalizó.