Por lo general, las novias suelen llegar a sus bodas en lujosos carros, limusinas o hasta carruajes, pero Gabriela Schirmer, de Argentina, quiso hacer algo diferente. En vez de hacer un ingreso tradicional, cumplió su sueño de niña al llegar a la iglesia en el camión de su padre y caminar junto a él hasta el altar.
Lo sucedido en Posadas, Misiones, tiene una gran historia por detrás, pues era claro que algo tan extraño tenía una razón sentimental. Y es que Gabriela siempre valoró el trabajo de su padre por más que muchas veces no estaba en casa. Era consciente de que esa la forma con la que su familia salía adelante, así que siempre quiso llegar al altar de aquella forma.
Con clásicas decoraciones de autos de novios y hasta con latas en la arte posterior, el gran camión de su padre, Luis Schirmer, se paseó con las calles de su localidad hasta llegar a la catedral donde se realizaría el evento. Eso sí, antes de todo ello tuvieron que sacar un permiso especial en la Municipalidad porque está prohibido que un vehículo así transite por aquellas calles.
En el Facebook de DBV Producciones se publicaron los videos y fotografías de este momento y no demoraron en viralizarse, principalmente en la comunidad argentina donde se produjo la boda. Incluso, varios medios de aquel país le dieron un espacio en sus diferentes plataformas noticiosas, ya que era algo muy llamativo por todos lados.
El video viral de una novia llegando al altar en un camión rojo
Así fue cómo Gabriela llegó a la iglesia donde se casaría. Como se puede ver, el camión estaba decorado con motivos de una boda y el padre recibió a la joven y ambos caminaron al altar.
El padre de la novia cuenta cómo surgió esa iniciativa
Durante una entrevista con FM Santa María de las Misiones, Luis Schirmer dio mayores detalles de aquella boda del 26 de diciembre, la cual llamó mucho la atención a nivel mundial gracias a su masificación a través de las redes sociales y medios de comunicación.
“Ella me avisó dos días antes que quería ser llevada a la iglesia en el camión. Habló con la gente de la Municipalidad de Posadas porque no sabíamos si podíamos entrar hasta ahí. Bajamos ahí frente a la Catedral, se hizo la misa, después saqué el camión, fuimos a la costanera, dimos una vuelta y volvimos al hotel”, cuenta Luis.
Del mismo modo, Luis contó algunas cosas que le tocó vivir durante su trabajo, el cual le impedía estar muchas veces junto a su familia en días especiales, perdiéndose fechas como cumpleaños y Navidad.
“Los cumpleaños a veces estaba y a veces no. Muchas veces los fines de años, mis cumpleaños y los cumpleaños de ellos también pasé solo en la ruta. Cuando uno trabaja con flete no puede decir ‘yo mañana me quedo’. Uno tiene que viajar”, añadió.
El padre de la recién casa ironizó con lo sucedido y manifestó que podría realizar el mismo servicio si es que hubiera una mujer interesada en llegar a su boda en un gran camión de color rojo.