Advertencia al lector: Esta historia aborda temas que podrían afectar a personas que batallan contra la depresión o experimentan pensamientos suicidas. De ser tal el caso, si necesitas ayuda o quieres recibir asistencia sobre cómo ayudar a un amigo, póngase en contacto con una línea de asistencia telefónica o a través de los recursos internacionales de prevención del suicidio que WhatsApp facilita a través de su página web oficial.
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Cuando una joven universitaria de Estados Unidos abrió su correo electrónico, vio que en su bandeja de entrada un nombre muy familiar. Se trataba de Lynn Matheny, su profesora en la Universidad George Washington, que en el transcurso de los siguientes días le envió múltiples mensajes preguntándole sobre asignaciones pendientes y preguntas relacionadas a su asistencia a las clases; sin embargo, un día el tono de los e-mails cambió drásticamente.
“Una semana o dos atrás, ella comenzó a enviarme mensajes dos o más veces al día preguntándome si había novedades sobre mi trabajo”, dijo Zenia Kim en entrevista con ABC7. “Y luego me decía ‘Por favor, respóndeme, no me importa si es sobre tu trabajo o notas, solo me importa tu seguridad’”, agregó la muchacha de 18 años, que a fines de octubre pasado fue internada en un hospital por un intento de suicidio.
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Viéndose forzada a dejar sus clases, la residencia que ocupaba y su idea de ser una estudiante de tiempo completo, Kim la pasó muy mal buscando un nuevo lugar donde vivir acorde a sus bajos ingresos, aunque jamás imaginó que la ayuda llegaría como caída del cielo a su correo electrónico. “Fue ahí cuando le envié un extenso mensaje explicándole lo sucedido, a lo que ella me respondió diciéndome que lamentaba lo que me pasó y me dio ánimos”, precisó.
Pero, ¿quién era esta persona a la que le contó lo que le había ocurrido? Pues nada más y nada menos que su profesora, que le pidió que le pasara su Venmo -un servicio de pago móvil propiedad de PayPal que permite a los titulares de cuentas transferir fondos a otros a través de una aplicación móvil, aunque por el momento solo está disponible en Estados Unidos-, algo que sorprendió de sobremanera a Kim, que no esperaba tal gesto de su parte.
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“Cuando ella me preguntó aquello, solo me sentí agradecida y satisfecha. No esperaba que me enviara mucho, unos 10 dólares o algo por el estilo – De hecho, no esperaba nada. Cuando vi lo que me mandó, pensé ‘Santo cielo, ¿qué? Eso es demasiado dinero’”, señaló la joven al referirse a los 1,000 dólares que recibió de la maestra, dinero que prometió reembolsarle en un futuro cuando su “situación mejore”.
“Oh Zenia, esto no es un préstamo, es un regalo para ti. Cuando dije lo de ‘págamelo luego’, me refería a otras personas que van a necesitar ayuda en el futuro”, fue la respuesta que recibió de la docente, la misma que Kim incluyó en una publicación de Twitter que se volvió viral, logrando no solo que otras personas se sintieran identificadas con su caso, sino que personas a lo largo del territorio estadounidense le enviaran dinero.
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Sobre qué fue lo que la empujó a intentar quitarse la vida, Kim se sinceró en su publicación y dijo que la pandemia de Covid-19 causó un gran detrimento a su vida social, sumado a los bajos ingresos que generaba por el recorte de sus horarios y turnos por las restricciones de funcionamiento a los restaurantes en Washington D.C. Todo eso la afectó de sobremanera ya que recientemente se había independizado y no contaba con ayuda financiera de nadie.
Fue así que el dinero que recibió llegó a su vida en el momento en el que más lo necesitaba. “Mi profesora realmente me ayudó así que no tengo que preocuparme por la renta del próximo mes, y puedo mantener el ritmo de trabajo que tengo sin tener que preocuparme demasiado”, agregó Zenia Kim que, después de todo lo que le tocó vivir, ahora se muestra más abierta a hablar sobre el estado de su salud mental, especialmente de su Trastorno por estrés postraumático (PTSD por sus siglas en inglés).
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Ella desea que la gente que lea su historia sepa que, a pesar del estado actual del mundo, la gente no se encuentra sola en sus luchas internas. “Aunque te digan que debes seguir viviendo por tus seres queridos, tus amigos o familia, creo que uno debería mantenerse con vida por uno mismo porque a ti se te dio este obsequio y es algo precioso”, añadió Kim, recalcando que debemos usar los recursos y sistemas de apoyo a disposición cuando lo necesitemos.
Y si tienen la oportunidad, Kim dijo que incluso pueden contactar si buscan a alguien que los escuche o lea. “Siempre hay alguien al que le importas, aunque quizás no lo sepas. Yo no sabía que le importaba tanto a mi profesora… pero el hecho que ella se diera cuenta que una de sus estudiantes no se apareció en clase o no entregó algún trabajo pendiente, arreglándoselas para contactarse conmigo significa mucho para mí”, finalizó.