En Nashville, Tennessee (Estados Unidos), Jim Spates es el protagonista de una increíble como conmovedora historia pues al recordar a su enamorada durante sus años en la escuela secundaria, le escribió una carta, pero su sorpresa fue tal cuando se enteró que la mujer no solo era madre, sino que la hija era de él, pero que nunca se lo había dicho debido a la distancia. Su relato se volvió tendencia en redes sociales como Facebook.
Un idílico encuentro
Spates hizo una exitosa carrera como DJ, al punto que ha sido incluido en el Salón de la Fama de Radio Nacional Negra en 2019 bajo su nombre artístico Jim Starr, pero su aventura se remonta al año 1964 cuando era un estudiante de primer año y notó a la bella Vivian White Butler de Greensboro:
“Ella era hermosa, hermosa, burbujeante. Ella tenía todas las cosas que estaba buscando en una joven”, expresó el hombre.
Una pronta despedida
Pronto, la química surgió entre ambos y comenzaron a salir. Ella recordó que su novio de ese entonces le llevaba libros, para luego pasar la tarde juntos en el porche de la casa de su madre, pero el amor no duraría mucho cuando él tuvo que migrar hacia Nueva Jersey ¿Cuál fue el motivo? Debía cuidar a su madre quien padecía de diabetes.
Antes de partir, Spates prometió a Vivian que regresaría, pero luego se iría a Maryland, pero, antes de esto, ambos se verían en Nueva Jersey; en dicha ocasión, ella quedó en cinta, pero nunca se lo pudo decir, pues no consiguió dar con su paradero.
La distancia se hizo tremenda entre ambos y no volvieron a saber más el uno del otro. Ella confesó que en aquellos años pensaba mucho en Jim: “Después de que perdí el contacto, solía pensar ‘¿él piensa en mí?’ porque siempre pensé en él”.
La vida continuó para ambos, Vivian se casó en 1990 y se dedicó a ser entrenadora de EMT; él, por su lado, hizo una productiva carrera como DJ.
El momento del reencuentro
El tiempo continuó su curso, hasta que apareció Dan McKeown, un amigo cercano de Spates quien, por esas curiosidades que tiene la vida, sabía todo sobre su antiguo amor, por lo que se dio a la labor de buscar a Vivian por Facebook hasta que no solo dio con su perfil, también con su dirección.
Una vez que McKeown le reveló estos datos a Jim, este no perdió tiempo para enviarle una carta al que fuera su amor y esta respondió invitándolo a cenar en 2020. Cuando él se apareció en el umbral de su puerta parecía que el tiempo se hubiese detenido.
“Mi corazón comenzó a latir muy fuerte como si me fuera a desmayar. Lo agarré, lo abracé y lo besé”, recuerda Vivian.
Padre y abuelo en un instante
Jim estaba cautivado con el amor de su vida, pero nada lo preparó para lo que estaba por venir cuando ella saca un libro de fotos donde se puede ver a una niña desde sus primeros años de vida, solo para revelarle que se trataba de su hija, Lareese White, quien ahora tiene 50 años.
“Ese fue un momento impresionante que nunca olvidaré”, dijo Jim: “Estoy aprendiendo el papel que juega un padre en la vida de una hija”.
Pero, además de esto, su hija era madre de dos niñas, Zoe y Lorenza, por lo que Spates no solo se enteró que era padre, también abuelo.
Matrimonio tras 50 años de separación
El reencuentro entre Vivian y Jim fue la reanudación de su amor, el cual se consumó en setiembre de 2021 cuando ambos (ella de 70 años y él de 74) contrajeron matrimonio: “Regresó a mi vida. Podría pasarle a otras mujeres: jóvenes, viejas, no importa la edad que tengas. Si todavía tienes a alguien con quien quieres revivir, pues, inténtalo”, sentenció.