Redacción Mag

, la socialité heredera de una conocida cadena internacional de hoteles a la que solían pagarle medio millón de dólares para asistir a fiestas, la que contribuyó al de (y posteriormente de todo su clan) y la que hace unos años se autoproclamó la inventora del ‘selfie’, vuelve a ser noticia esta vez por su incursión como chef con sus tutoriales para difundir el arte de la gastronomía con una pizca de glamour, una cucharada de estilo y media taza de su original sentido del humor.

Esta semana, la estrella original de los programas reality de estrenó su programa de cocina “Cooking With Paris” (Cocinando con Paris en español) a través de su canal de y, en su primera entrega, cocinó uno de sus “infames” platillos: Lasaña “Sliving”, término acuñado por ella misma en el que mezcla las palabras “slaying” (jerga en inglés que se usa cuando alguien luce increíblemente bella y lo hace notar) y “living” (vivir).

“Como todos saben… bueno, quizá no todos lo sepan”, comienza , de 38 años, a dirigirse a su público mientras hace su ingreso a la lujosa cocina cargando a su perro chihuahua tamaño Teacup llamado ‘Diamond Baby’, al que presenta ante cámaras como su asistente luciendo un diminuto delantal de Chanel. “La gente no sabe que soy una asombrosa cocinera”, agrega, mientras cuenta cómo de niña solía ayudar a su madre a preparar pastas y lasañas.

Con esta divertida introducción, comienza su tutorial de 16 minutos en los que, paso a paso, muestra su forma de preparar este plato empezando como cualquiera lo haría hirviendo –o “cociendo al vapor” como ella misma señala en el video de – los fideos de la lasaña, aunque posteriormente recomendó a sus suscriptores que compren la del tipo que “no se tenga que cocer”.

De su enorme refrigerador, la socialité saca el resto de los ingredientes: casi dos kilos de carne molida, casi tres kilos de queso ricota y poco más de 600 gramos de mozzarella, pero al colocarlos todos en la mesa se observa que su asistente personal aparentemente exageró un poco con la cantidad de ingredientes requeridos para su preparación. Pese a ello, la cocinera aprovechó para dar un consejo a quienes seguían su receta al pie de la letra.

“Les recomiendo que compren mozzarella rallada, ya que ahora tendré que hacerlo yo misma”, expresó . “Esta es mi primera vez cocinando aquí así que no tengo idea si tengo [un rallador de queso]. Estoy haciendo lucir esto como si fuera mucho más trabajoso de lo que realmente es”, señaló mientras buscaba entre sus utensilios de cocina el que le permitiría seguir adelante con la preparación de su platillo.

Superado este percance, continuó con su tutorial fiel a su estilo pero haciendo bastante desorden. “Esa es la razón por la que tengo puestos mis guantes de chef”, señala, mostrando un par de mitones oscuros de manejo, que al parecer no lucían muy cómodos para cocinar pero al parecer hacían juego con su suéter negro con brillantina que llevaba bordado un prominente arcoíris con una sonriente nube.

Sin embargo, ningún momento importante de la vida de como su debut como chef en estaría completo si no se tomara un momento para tomar una fotografía de lo que hace para compartirlo con sus millones de seguidores en las redes sociales. “Solo para que sepan que estoy en el ahora”, dice mientras toma una fotografía con su celular de los ingredientes que tiene para preparar su famosa lasaña para publicarla posteriormente.

Durante los siguientes siete minutos aproximadamente, deambula por su cocina buscando los utensilios correctos (de los que no conoce sus nombres), manipula carne cruda con sus mitones de tela puestos y casi quema su larga rubia cabellera al pararse cerca de la estufa. Pero nada se compara a cuando se pone a freír la carne y se percata que se le pasó la mano con la sal.

Y es que en este momento de su debut en como chef, la socialité sorprende a propios y extraños al revelar un truco de cocina quizá nunca antes visto: remojar una toalla de papel con agua embotellada de una marca conocida por ser una de las más caras –ya que, según dijo, “nadie sabe qué hay en las cañerías”– para luego pasarlas por la carne caliente para remover el exceso de sal.

Prosiguiendo con el tutorial, cuando se topa con una cebolla y un diente de ajo, se pregunta si realmente tenía que cortar estos vegetales para preparar su lasaña, llegando a la conclusión de que no debería incluirlos. Finalmente, después de varios momentos que quedarán inmortalizados en este video de , comenzó a armar el esperado platillo para el beneplácito de su audiencia.

“No sé lo que es esto pero creo que funcionará”, dice la millonaria con mucha confianza mientras coloca la bandeja de lasaña cubierta con papel aluminio dentro del horno, hacer una pequeña pausa para ponerse un poco de su colonia “neblina de unicornio” –alejada de la comida, por supuesto– y exclamar que preparar este tipo de comida “es algo que muchos creen que es difícil pero en realidad es muy divertido y fácil”.

Al final, la lasaña, rebosante de queso mozzarella, luce apetecible al sacarla del horno después de haber pasado unos 30 a 40 minutos cocinándose (aunque muchos no pudieron evitar preguntarse si en realidad se trataba de la misma) y, si bien no es la chef más talentosa del mundo, demostró que sabe cómo desenvolverse dentro de la cocina y de reinventarse ahora como una estrella de los tutoriales de .

“Voy a seguir cocinando, así que háganme saber qué quieren que sea lo próximo que prepare usando el hashtag #CookingWithParis”, exclamó, no sin antes pedirle a su audiencia que se suscriba a su canal de y prometiéndoles un nuevo episodio el próximo lunes. Hasta el momento, su video ya lleva más de 1 millón de reproducciones y miles de comentarios, convirtiéndose en otro éxito instantáneo de su fructífera carrera.

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