Pollo al sillao. (Foto: nuestra_sazon - Instagram)
Pollo al sillao. (Foto: nuestra_sazon - Instagram)
Redacción Mag

El pollo al sillao es un plato producto de la fusión de la con la comida peruana. Es una receta muy fácil de preparar y la puedes hacer para un almuerzo en familia. Para hacerlo necesitaras apenas unos cuantos ingredientes. Asegúrate tener insumos de calidad para que salga exquisito. Puedes acompañar el pollo al sillao con unas o arroz blanco.

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Ingredientes

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  • 4 muslos de pollo
  • ½ taza aceite
  • ½ cucharada ajo molido
  • ½ cucharada kión rallado (jengibre)
  • ½ taza caldo de pollo
  • ¼ taza sillao (salsa de soya)
  • 1 pimiento rojo
  • Cebolla china
  • Sal al gusto

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Preparación

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  1. Aderezar los muslos de pollo con ajo, kión y sillao. Dejar salpimentar por 20 minutos o más. Es recomendable dejarlo marinar en la refrigeradora. No te olvides de cubrirlo con un plástico.
  2. Freír las presas en el aceite caliente hasta sellarlas y dorarlas. Cerca de 3 minutos por cada lado.
  3. En el mismo aceite agrega el resto de ajo, kión, sillao y el caldo de pollo. Regresa el pollo a esta mezcla y dejar que se cocinen por 15 a 20 minutos. Agregar la cebolla china cortada y el pimiento. Espolvorea ajonjolí. Sirve con arroz blanco o papas sancochadas o doradas.

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Ficha

Tiempo preparación: 30M

Tiempo total: 45M

Porciones: 4

¿Cómo ahorrar dinero al cocinar?

Evita las verduras ya cortadas

Ser un poco perezoso en la cocina suele salir caro, así que a la hora de ahorrar lo primero es tener un cuchillo y demostrarte a ti mismo que eres capaz de cortar esa cebolla o zanahoria. No te harás millonario, pero si practicas mucho eso del corte puede que te ahorres algunos centavos para un gustito.

Nada de desechar verduras y frutas: cremas y batidos

Aquí no se desperdicia nada, como diría la abuela, y más si queremos ahorrar. Las frutas y verduras que estén un poco marchitas pueden tener una segunda vida en forma de sustanciosas cremas y refrescantes batidos. ¿Un plátano mustio? A la batidora con un yogur y tenemos un delicioso batido.

Haz caldos

No sólo como ingrediente para otras preparaciones, sino para improvisar una sopa salvadora. Comprarlo hecho no siempre es buena idea. Pon un día la olla y preparar unos litros de caldo para, de paso, aprovechar algunas de esas verduras que ya no están para aguantar más tiempo.

Busca productos de temporada

El sentido común es básico a la hora de hacer las compras y pensar en el menú de la semana o el mes. Si somos de ir al mercado será fácil saber qué está de temporada porque será lo más económico. A partir de ahí, sólo hay que pensar qué cocinar con eso que hemos comprado a buen precio en el supermercado.

Cortes de carne más baratos

Ser carnívoro también es compatible con ahorrar. Es más cuestión de saber comprar que de saber cocinar y tener claro que no siempre los cortes más caros son los más exquisitos. ¿Has probado los contramuslos de pollo? Mucho más barato y sabrosos para, por ejemplo, acompañar con un cremoso puré de papas.

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