¿Por qué algunas personas besan con los ojos abiertos? Mientras que la mayoría cierra los ojos para entregarse al momento, otros prefieren ver, lo que puede revelar aspectos de su personalidad y emociones. ¿Es una señal de falta de entrega, una búsqueda de mayor intimidad o simplemente una cuestión de costumbre? La psicología tiene respuestas, y aquí exploramos el significado de besar con los ojos abiertos.
El cine nos ha inculcado la idea de que los besos más apasionados deben darse con los ojos cerrados, pero esto no siempre es así. Para algunos, besar con los ojos abiertos no significa falta de emoción, sino una forma de intensificar la conexión visual o mantener el control del momento. La psicología nos ayuda a entender qué hay detrás de esta elección y qué puede revelar sobre la personalidad y las relaciones.
Según un artículo de la Gaceta de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), los besos no solo refuerzan el lazo afectivo entre las parejas, sino que también favorecen la autoestima, ayudan a quemar calorías, mejoran la circulación, disminuyen el estrés e incluso pueden retrasar la aparición de arrugas en la piel.
Estos efectos positivos se deben a que, según el Instituto Mexicano de la Juventud, al besar se activan más de 30 músculos faciales y se liberan neurotransmisores y hormonas vinculadas al placer y al bienestar.
Datos sobre besar con los ojos abiertos
Si observas que tu pareja besa con los ojos abiertos, es común pensar que no siente un amor genuino, que lo hace por compromiso en lugar de por deseo, o que simplemente no está disfrutando el momento y espera que termine pronto.
No hay razón para alarmarse. Antes de dejarse llevar por pensamientos negativos, es importante recordar que no todo el mundo cierra los ojos al besar, y eso es algo completamente natural.
Según UnComo, las mujeres tienden a cerrar los ojos al besar con más frecuencia que los hombres. Se calcula que aproximadamente el 90% de ellas lo hace, mientras que solo el 30% de los hombres sigue esta práctica.
La principal razón por la que un hombre podría besar con los ojos abiertos es su tendencia a no entregarse por completo a sus emociones, especialmente en una sociedad que, durante años, les ha inculcado la idea de evitar mostrar vulnerabilidad y ternura.
Otra posible razón es su deseo de prolongar el encuentro íntimo. Al cerrar los ojos, el cuerpo se sensibiliza más a los estímulos, lo que podría acortar la duración del momento. En cambio, al mantenerlos abiertos, las sensaciones placenteras se postergan, permitiendo disfrutarlo por más tiempo.
También puede ser que mantenga los ojos abiertos para observar la reacción de su pareja y disfrutar visualmente las emociones que surgen en el beso.
Si la relación está en sus inicios, es posible que aún no se sienta completamente cómodo para entregarse al momento con los ojos cerrados, por lo que prefiere dar besos cortos mientras mantiene la mirada.
El significado de besar con los ojos abiertos
El significado de besar con los ojos abiertos puede variar según la persona y el contexto. Desde la psicología, este comportamiento puede reflejar diferentes aspectos emocionales y de personalidad. Algunas personas lo hacen porque desean intensificar la conexión visual con su pareja, observar sus reacciones o simplemente porque no sienten la necesidad de cerrar los ojos para disfrutar del momento.
En otros casos, besar con los ojos abiertos puede estar relacionado con una necesidad de control, dificultad para entregarse completamente a las emociones o incluso un mecanismo de protección ante el miedo a la vulnerabilidad. También hay quienes lo hacen de forma inconsciente o por costumbre, sin que eso implique una falta de amor o interés en la relación.
“Los besos pueden reflejar mucho, son una especie de diagnóstico de la situación de nuestra relación. [...] Besar con los ojos abiertos puede tener un mensaje un poco frío o distante, que podría indicar que no estás tan enamorada de tu pareja actualmente o que tal vez estés distraída y no estás enfocada en el beso”, comentó el especialista en parejas Mario Garcia Almeyda.
En definitiva, no existe un único significado universal. La clave está en el contexto y en la comunicación con la pareja para entender qué hay detrás de este gesto en cada caso particular.
Periodista. Estudió Comunicación en la Universidad de Lima. Diez años de experiencia en medios digitales. Actualmente se desempeña como redactor del Núcleo de Audiencias de El Comercio.