Durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo se ha hecho habitual el uso de los juegos pirotécnicos en el Perú, pese a las advertencias de las autoridades sobre aquellos artefactos que representan peligrosidad. Las fuertes detonaciones no solo afectan a nuestras mascotas, sino que ocasionan daños en el oído humano.
En el Perú, solo hay siete ferias autorizadas para la venta pirotécnicos, de acuerdo con la Superintendencia Nacional de Control de Servicios de Seguridad, Armas, Municiones y Explosivos de Uso Civil (Sucamec). Sin embargo, desde el mes de diciembre se han vendido ilegalmente estos artefactos en distintos lugares, muchos de los cuales son considerados peligrosos.
Los juegos pirotécnicos no solo pueden ocasionar accidentes, sobre todo si son manipulados por menores de edad, sino que las fuertes detonaciones afectan el sistema auditivo.
El oído humano tiene la capacidad de tolerar un máximo de 55 decibeles sin afectar la salud, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), pero si las personas escuchan las detonaciones de artefactos como “cohetones” “rata blanca”, entre otros, estos pueden llegar a superar los 120 decibeles. Es decir, más de dos veces el nivel de ruido tolerable a nuestros oídos.
¿Cuáles son los daños auditivos que pueden provocar los pirotécnicos?
Los malestares que se pueden producir en el sistema auditivo, a raíz de las detonaciones, van desde zumbidos, dolor de cabeza, mareos, alteración del equilibrio, perforación del tímpano y hasta pérdida auditiva.
No obstante, la población más vulnerable son los bebés, niños, mujeres en etapa de gestación y adultos mayores, de acuerdo con Luis Verástegui Barahona, especialista en audiología y director del centro audiológico AudiPhone.
A este grupo se le suman las personas con problemas de salud, sensibilidad auditiva y aquellos que tienen enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes o en situación de autismo.
“Estas detonaciones de gran intensidad, generan zumbidos y sensaciones de “pitillos”, los cuales disminuyen su efecto al paso de las horas. También pueden ocasionar malestares como dolores de cabeza, mareos y alteración del equilibrio. En situaciones graves, una explosión cercana al oído puede perforar el tímpano, destruir la estructura del oído y provocar en algunos casos pérdida parcial o total de la audición”, explicó Verástegui.
¿Cómo protegerse del ruido que generan los juegos pirotécnicos?
Aunque será inevitable escuchar las detonaciones en las calles, el especialista realizó algunas recomendaciones para cuidar el sistema auditivo.
- Mantenerse alejado unos 20 o 30 metros de la zona donde se desarrolla la explosión
- Proteger los oídos con tapones de silicona o simplemente cubrirlos con algodón, con el objetivo de aminorar el sonido de la detonación.
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