La mascarilla o cubrebocas se ha vuelto parte de nuestro día a día y no podemos dejarla de lado al momento de salir a la calle, recibir un paquete en casa o sacar a pasear a las mascotas. Esta es la protección más segura contra el COVID-19, además del lavado de manos y el distanciamiento físico; sin embargo, con la llegada del verano y sus altas temperaturas, más de uno siente incomodidad al usarla o piensan que al tenerla puesta ya está a salvo de los peligrosos rayos UV. Aquí te detallamos las consideraciones que debes tener en días de sol e intenso calor.
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Mitos sobre la mascarilla
El Seguro Social de Salud del Perú (EsSalud), explicó en su cuenta oficial en redes sociales algunos mitos sobre el uso de la mascarilla en esta estación del año, donde muchos asumen que ponerse una puede generar un golpe de calor, cuando esto es mentira, pues lo que podría causar es que haya un poco más de sudor y elevar la sensación de calor, pero no va a ocasionar afectaciones graves.
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Los especialistas resaltan que es totalmente falso que mojar la mascarilla reduce el calor, que solo la parte exterior de la mascarilla se contamina y que esta protege de los rayos UV.
Por el contrario, lo que en verdad sucede es que si alguien humedece la mascarilla, esta “pierde su capacidad de filtrar partículas y se incrementa el riesgo de contagio”, además, “el aumento de temperatura provoca mayor eliminación de dióxido de carbono (CO2) húmedo y caliente. Al respirar esto produce hongos y otros microbios”.
Con relación al uso de protector solar, “no existen estudios que demuestren que la mascarilla protege la piel de los rayos solares”.
Cómo aplicar el protector solar
Sabiendo esto, es importante tomar en cuenta que los rayos ultravioleta tienen la capacidad de atravesar la tela según su calidad, grosor y color, por lo que aquella parte del rostro que está protegida de los virus, no lo está del sol.
Los especialistas de la Liga Contra el Cáncer a través de su campaña “Ahora Protégete del Sol” explican cómo debes aplicarte correctamente el bloqueador solar con la mascarilla, sobre todo aquellos que en la actual emergencia sanitaria deben salir a trabajar o realizar caminatas durante 1 hora como máximo.
- Utilizar un bloqueador solar diariamente con un factor no menor a 30 SPF.
- Aplicarlo 30 minutos antes de salir y una nueva aplicación cada 2 horas.
- Hacerlo de manera uniforme por todo el rostro para asegurar la protección por todos lados, en especial las zonas expuestas como las orejas, párpados, ojeras, cuello, nuca y escote.
- Evitar exponerse al sol sin protección entre las 10 a.m. y las 3 p.m., pues la radiación ultravioleta se intensifica mucho más durante este periodo.
- Realizarse un chequeo de cáncer de piel una vez al año, si detecta alguna anomalía en alguna parte de su cuerpo que ha sido expuesto al sol, descubrirlo a tiempo puede salvar su vida.