La sandía es una de las frutas preferidas por muchas personas, aunque una de sus desventajas es que puedes ensuciarte cuando la comes. Sin embargo, existe un truco casero que te permitirá cortarla de manera adecuada para evitar ese problema.
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Si hay una fruta que no puede faltar en tu casa, sobre todo en temporada de verano, esa es la sandía. Además de ser muy refrescante, tiene muchos de nutrientes y proporciona vitaminas, minerales y antioxidantes, tal como explica Psicología y Mente.
Debido a que es una fruta con gran volumen, muchas personas tienen complicaciones al momento de cortar la fruta. En un artículo anterior, Mag te contó una técnica de corte bastante original y ahora te traemos un truco casero para evitar te ensucies mientras la disfrutas.
¿Cómo comer la sandía sin ensuciarte?
Sigue los pasos que recomiendan desde Antena 3 para cortar la sandía y, de esta manera, evitarás ensuciarte el rostro y la ropa.
- Parte la sandía por la mitad
- Corta una rebanada de modo que la corteza quede gruesa
- Corta la rebanada en cuatro partes
- A continuación escoge una de las piezas y corta la pulpa desde el centro hacia la parte superior de los lados formando una V
- Te quedará una figura similar a la de un diamante y, de esta manera, el jugo no se desparramará
Cómo conservar una sandía fresca por más días
- Cubre la sandía abierta con papel film bien sellado. De esta manera, se evitará que el aire llegue
- Si la compraste cortada, retira el papel film y lava la fruta para evitar la presencia de microorganismos. Envuélvela de nuevo con otro trozo de papel film
- Si quieres congelar la sandía, corta en trozos medianos y retira la cáscara
- Coloca los trozos de sandía en un táper y cubre con papel de horno
- Cierra herméticamente con la tapa y congélalo
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