Salir de esa venta de garaje o tienda de segunda mano con artículos por los que pagaste una verdadera ganga puede darte mucha satisfacción, pero nunca deberían amenazar tu salud o la de tu familia. Si lo que compraste no funciona correctamente, ¿Dónde está la ganga? Hoy en Mag te contamos las 5 cosas que nunca deberías comprar de segunda mano. Así que toma nota de estos interesantes trucos caseros.
Cosas que nunca deberías comprar usadas
- Medicinas, de ningún tipo. Esto podría parecer algo obvio, pero eso no detiene a los vendedores motivados a tratar de deshacerse de medicamentos caducados y hasta usados. Jamás compres ningún tipo de medicamento recetado o de venta libre que esté usado.
- Cualquier cosa para un recién nacido. Esto incluye ropa para bebé, biberones, ropa de cama, cunas, cochecitos de bebé y sillas de auto. No sabes quién fue la última persona que lo usó, no sabes si lo desinfectaron adecuadamente. Y no necesariamente sabes si están dañados o rotos.
- Colchones, ropa de cama, almohadas y sábanas. No sabes quién o qué durmió en él. No sabes si tiene ácaros de polvo, moho o garrapatas. Hay mucho que no se sabe como para arriesgar tu salud. La única excepción es si la ropa de cama todavía está empaquetada.
- Wetsuits o ropas de baño. Primero, no sabes quién ha estado usando un traje de baño usado. Y, aunque probablemente puedas esterilizarlo con agua caliente y lejía, los trajes de baño no se caracterizan exactamente por su durabilidad. El traje puede estar estirado o apretado.
- Perfumes, colonias, cosméticos o cremas para el cuerpo. Pocas cosas son más personales que las que nos frotamos o rociamos en el cuerpo. Ni siquiera consideres comprar estas cosas usadas. Los cosméticos usados pueden ser criaderos de gérmenes y de posibles infecciones.
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