A inicios de abril, Powerball tuvo un ganador del premio mayor equivalente a 1.3 mil millones de dólares, una locura de dinero. Con el pasar de las semanas todos conocimos al afortunado residente de Oregon que se llevó esa cantidad. Se trataba de un inmigrante de Laos de nombre Cheng Saephan, quien padece cáncer desde hace ocho años y que acababa de tener su última quimioterapia. Una historia que toca las fibras de cualquier persona, pero no solo ello...
El de origen asiático, en una conferencia de prensa, dio a conocer que optó por el pago único, así que el monto que se llevará es de 422 millones de dólares después de impuestos, cifra que sigue siendo muy grande. Pero el dinero no es todo para él, ya que también confirmó que la mitad será destinada a su amiga Laiza Liem, quien lo apoyó económicamente en su locura de comprar 20 boletos de lotería. Al final, esa decisión los llevó a ser millonarios.
Sin duda alguna, toda una historia que merece contarse. Sin embargo, no son los únicos que se llevarán dinero, sino que, como se sabe, la compañía premia a la tienda donde se vendió el boleto ganador, así que hubo una buena recompensa adicional que ahora te daré a conocer, pues se realizó en una ceremonia protocolar.
¿DÓNDE SE VENDIÓ EL BOLETO?
Cheng, quien llegó a los Estados Unidos en 1994, compró el boleto ganador del cuarto premio más grande de Powerball en una tienda de alimentos Plaid Pantry de Oregon, ubicada específicamente en 6060 NE Columbia Boulevard, por lo que los directivos de la lotería fueron hasta allí.
¿CUÁL FUE EL BONO PARA LA TIENDA?
El premio que fue entregado a la tienda fue de 100 mil dólares y fue recibido por un representante de la misma, quien mencionó estar contento por haber vendido el boleto ganador, pues les ha dado notoriedad en todo el país. De la misma forma, afirmó que utilizarán el dinero extra para seguir invirtiendo para mejor en favor de sus clientes, proveedores y trabajadores.
“La energía y la emoción que experimentamos al vender el boleto ganador han sido un gran impulso moral para todo el equipo de Plaid. Estamos muy orgullosos de nuestra marca, que presta servicios en el noroeste del Pacífico durante más de 60 años. Este cheque de bonificación se reinvertirá en nuestro negocio para beneficiar a nuestros asociados, clientes y proveedores locales”, dijo el presidente y director ejecutivo de Plaid Pantry, Jonathan Polonsky.
UNA SORPRESA PARA LOS CLIENTES
El director de la Lotería de Oregón, Mike Wells, sorprendió a los presentes en la tienda cuando llegó y comenzó a repartir raspaditos. Esto es algo poco común, así que fue muy bien agradecidos por aquellos clientes que, por hacer sus compras, también tuvieron la oportunidad de probar suerte y llevarse algo de dinero extra.
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