Nadie se lo imaginó. En Alaska (Estados Unidos), una osa negra y su cachorro tuvieron un gran festín de golosinas cuando se subieron a una camioneta que transportaba donas Krispy Kreme y devoraron múltiples cajas de estos dulces recién horneados sin que el repartir se diera cuenta.
El curioso incidente ocurrió en la Base Conjunta Elmendorf-Richardson, donde la camioneta estaba estacionada mientras el repartidor realizaba una entrega en una tienda cercana. Momentáneamente, el conductor dejó la puerta de la camioneta abierta, lo que permitió a la madre osa y su cachorro entrar y comenzar su banquete.
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“Se podía oír cómo abrían los paquetes”, mencionó Shelly Deano, gerente de la tienda JBER. “Estábamos tratando de ganarle a la camioneta pero seguían comiéndose todas las donas. Se comieron 20 paquetes de donuts y creo que seis paquetes de tres donuts de chocolate”.
Al percatarse de lo sucedido, Deano se comunicó con los de seguridad de la base, por lo que hicieron posible sacar a los osos por medio del ruido de las sirenas. Los animales se fueron corriendo hacia un bosque cercano.
Por su parte, Candice Sargeant, gerente general de la tienda Krispy Kreme, aseguró que sus trabajadores aprendieron una gran lección a raíz de lo sucedido. “Definitivamente aprenderemos a deslizarnos por nuestra rampa y cerrar las puertas para asegurarnos de que los osos no vuelvan a entrar allí”, mencionó riendo.