La madruga del 24 de febrero, el recolector Maximiliano Sotelo se encontraba realizando su ronda por las calles de Lanús (Buenos Aires, Argentina), cuando escuchó un llanto proveniente de una bolsa. Inmediatamente, él la abrió y vio a un bebé recién nacido. La historia traspasó las fronteras a través de Facebook.
Después, Maximiliano pidió ayuda a los vecinos de la zona. Una señora, llamada Laura Gamboa, salió al notar que algo sucedía. Fue así que decidieron llevar al nene al hospital.
Ahí, los médicos determinaron que solo tenía unas 8 horas de vida. “El bebé estaba helado y no paraba de llorar”, contó Sotelo a Telefé Noticias.
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Gamboa, quien compartió la historia en su cuenta de Facebook, también fue entrevistada. “Le empezamos a sacar toda la basura que tenía encima y lo pusimos sobre una manta”, señaló.
Se conoció que el menor ha sido nombrado como Tomasito. Hasta ahora se desconoce la identidad de la madre.
“Ese hombre merece ser reconocido por las autoridades. En verdad es alguien de buen corazón”, indicó un usuario de Facebook.