Messi y la generación que creció admirándolo por la televisión

Si Julián Álvarez pasó de corretear a Messi para pedirle una foto a ser su compañero ideal en Qatar 2022, Enzo Fernández pasó de escribirle una carta durante su adolescencia a ser su pase seguro, su salida limpia en la transición de defensa a ataque.

Cuando el 16 de junio del 2006, en Alemania, Messi hizo su debut en los Mundiales luego de ingresar por Maxi Rodríguez, en la goleada ante Serbia y Montenegro, Julián tenía apenas 6 años y Enzo con las justas 5.

Eran dos pequeños revoltosos, que recién empezaban a encariñarse con el balón y cuyos padres no les despegaban un ojo, cuando Messi se estrenó en ese mismo partido, con un gol de derecha.

Alexis Mac Allister, el oxígeno de la Albiceleste en el mediocampo, era otro chiquillo que recién empezaba en la educación primaria, así como Cristian ‘Cuti’ Romero, el rústico defensa que andaba por los 8 años y todavía no pateaba canillas.

Todos ellos han visto a Messi escribir su historia. Partido a partido. Gol tras gol. Crítica tras crítica. Han contemplado cómo tejía su leyenda en el Barcelona de España y cómo era cuestionado cada vez que no rendía en igual proporción en el país donde nació y dejó de vivir a los 13 años.

Si el Messi por el que salen a ‘matar’ en cada partido hoy goza de una comodidad insólita en el seleccionado argentino, es, en gran medida, por ellos. Un equipo que se deja gobernar por él y que lo rodea como un astro. Un escudo con el que puede cubrirse, pero a la vez una espada con la que puede dañar. Corren lo que él ya no puede, y aprovechan sus destellos, frecuentes en el último mes.

“Es su mejor Mundial. Vi a un Leo Messi en flamas en la Copa América. Pero lo veo jugando en el Mundial y nada que ver, está a otro nivel”, ha dicho el ‘Dibu’ Martínez, que andaba en la secundaria en Alemania 2006, y hoy protege el arco de Leo.

¿Cuántos cumplen el sueño de brillar con su ídolo? Son pocos, pero son. Y estarán juntos ante Francia este domingo.