Las autoridades de Kenia tuvieron que desplegar a una fuerza policial para tratar de desmantelar el atasco de tráfico que por tercer día consecutivo paralizó la semana pasada la autopista que une Mombasa con Nairobi, la capital.
A lo largo de unos 50 kilómetros la carretera estaba atestada de camiones, autobuses y vehículos privados que se quedaron atrapados durante tres días.
Esta autopista es crucial para la economía del este de África, ya que sirve de vínculo entre la ciudad portuaria de Mombasa y varios países del interior, como Uganda, Sudán del Sur y Ruanda.
La zona más afectada por el atasco fue Taru, a unos 80km de Mombasa.
Según los corresponsales de la BBC el atasco se generó por obras en la carretera después de fuertes lluvias.