Por lo menos hasta el 2019, el verdadero protagonista de las balaceras entre personas comunes en el mundo, era Estados Unidos. Según CNN, para entonces era el primer proveedor de armas civiles.
MIRA: Ocho minutos de terror: un exalumno mata a tiros a siete años en una escuela de Rusia
Su mercado interno soportaba semejante demanda: de los 650 millones de armas que estaban en manos de civiles en el planeta, el 48% pertenecían a estadounidenses.
Las cifras deberían preocupar, si se tiene en cuenta que una de las razones que explicarían las constantes masacres y balaceras es el fácil acceso a las armas.
La cadena de televisión anota que hay 89 de ellas por cada 100 estadounidenses.
- Darkside: los hackers que se venden como Robin Hood y son el gemelo malvado de una startup de Silicon Valley
- Rusia prepara una ley para excluir de las elecciones a los partidarios del líder opositor Alexei Navalny
- Rusia celebra el Día de la Victoria mostrando sus poderosas armas y con fuegos artificiales | FOTOS
Pero se trata de un mercado muy lucrativo, y buscando formas de dominarlo, Rusia también empezó a apostar por el negocio de fabricación de armas.
“El País” anotó, en el 2017, que el presidente Vladimir Putin se puso las pilas y ordenó que la industria bélica se diversificará para encontrar nuevos caminos en el sector civil.
Se trata, cuenta el medio, de una política de “rearme de sus Fuerzas Armadas”, pero, más que todo, de encontrar la forma de rentabilizarla a partir de las “aplicaciones civiles”.
En esa lógica, se dictó cambiar el paradigma: industrialización en reemplazo de la importación.
Un claro ejemplo es el caso de Uralvagonzavod (UVZ), “la mayor fábrica de tanques del país y una de las mayores del mundo”.
Fundada en 1936, la empresa tuvo que enfrentarse a muchos problemas y obligada a producir “vagones, plataformas de ferrocarril, cisternas y tractores, además de blindados” para sobrevivir.
Con una economía que pendía de un hilo, Rusia decidió integrar la empresa a un megaconsorcio estatal que implantó otra mirada.
El diario español explica que, cuando esto sucedió, UVZ dedicaba el 30% de su producción “al sector civil” y lo demás al militar, a “pedidos del Ministerio de Defensa y exportaciones”.
Putin, sin embargo, ordenó que, para el 2030, el porcentaje alcance el 50%, meta a la que se podría llegar en el 2025.
Y les ha ido bien, aumentando sus ventas considerablemente.
MIRA: Putin encarga revisar normativa de permisos de armas tras tiroteo en escuela de Kazán que dejó 8 muertos
AL ALCANCE DE TODOS
Según la Anadolu Agency, la pandemia del coronavirus hizo que los civiles rusos empezaran a comprar más armas.
Porque, en los últimos diez años, la ley rusa que regula este asunto ha variado. Al respecto, el portal Sputnik anotó, en el 2011, que los rusos tenían derecho a “poseer y portar armas incapacitantes no letales y armas de caza”.
La licencia para conseguir las armas debía renovarse cada cinco años.
Y, para entonces, los registros de los últimos cinco años demostraban que “más de 60 personas murieron y unas 600 resultaron heridas en más de 1.500 ataques con armas incapacitantes no letales”, según Sputnik.
Ya en el 2014, la web El Economista anotó que el gobierno había “suavizado las restricciones” y que se permitía llevar armas para la autodefensa.
Hasta ese momento, solo se permitía portar armas para “actividades como la caza o el tiro deportivo, previa licencia del Ministerio del Interior”, así como otros controles y cursos de seguridad.
“No obstante, [está] prohibido llevarlas en instituciones educativas, establecimientos que operan por la noche y sirven alcohol y en las reuniones públicas masivas, como las manifestaciones callejeras o protestas”, recogió el medio.
Y agregó:
“La legislación también prohíbe portar un arma mientras se está bajo la influencia del alcohol”.
Y así es como, tras el embate del COVID-19, se pudo dar el aumento de las ventas so pretexto de la autodefensa.
En una entrevista de la Anadolu Agency al gerente general de ORSIS, empresa del rubro, se conoció que “la venta de todos los modelos, incluidos rifles, han aumentado. Incluso, en algunos periodos, la demanda sobrepasó la oferta”.
“La razón más importante es el aumento de la ansiedad y la incertidumbre que ha surgido inevitablemente en el mundo debido a la pandemia”, el gerente.
Pero hay que tener cuidado: en Rusia, los civiles no pueden acceder a cualquier arma, según un documento de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito de las Naciones Unidas.
“La ley prohíbe la posesión [de]: cualquier arma de fuego automática de cañón largo con una capacidad de cargador superior a 10 cartuchos; armas de fuego automáticas diseñadas para imitar otros modelos; cartuchos con balas perforantes de blindaje, etc. (Artículo 6 de la Ley Federal de armas)”.
VIDEO RECOMENDADO
TE PUEDE INTERESAR
- Desaparece el exjefe del hospital donde fue ingresado Alexei Navalny tras envenenamiento con Novichok
- La Armada estadounidense intercepta alijo de miles de armas rusas y chinas en el Mar Arábigo
- El príncipe Michael de Kent, primo de la reina Isabel II, se ofrece como intermediario para hacer negocios con Putin
- Nikolai Fyodorov, “el Sócrates de Moscú” que impulsó el “cosmismo” y la carrera espacial soviética
- Turismo de vacunas: ¿Cuántos peruanos pueden viajar hacia Estados Unidos para inocularse este año?