Este viernes Medicina Legal de Colombia confirmó que en el tejido extraído a Jorge Enrique Pizano, ex controller del consorcio Ruta del Sol II, no se encontraron rastros de cianuro.
El director de Medicina Legal, Carlos Eduardo Valdés dijo que se mantiene el dictamen del hospital en el sentido en que la muerte de Pizano se dio por un infarto.
“Hay muchas dudas y por eso el Instituto hizo la prueba en dos laboratorios de manera paralela, que no se comunicaron entre ellos. Por eso los resultados son 100 por ciento confiables”, dijo Valdés, al señalar que las pruebas se realizaron en Bogotá y en Ibagué.
Pizano fue traslado el pasado 8 de noviembre al Hosptital San Rafael de Facatativá donde se determinó que la causa de muerte -de uno de los testigos claves en el caso contra Odebrecht- fue un infarto fulminante.
Sin embargo, la fiscalía de Colombia abrió una investigación penal para determinar las causas de la muerte del ingeniero Jorge Enrique Pizano, teniendo en cuenta que, días después de su deceso, su hijo Alejando Pizano murió al consumir un líquido de una botella que supuestamente tenía agua saborizada, pero que en realidad contenía cianuro.
Al detectar un mal sabor, Alejandro intentó expulsar el liquido, pero fue demasiado tarde. Lo extraño es que la botella se encontraba en el escritorio de su padre, por eso se abrió la hipótesis de que no solamente el infarto hubiera producido su muerte.
Según peritos del Instituto, la sustancia por sí sola puede o terminar con la vida de la persona o desencadenar en un infarto, que fue el dictamen que dio el hospital. Ahora se deberá establecer por qué estaba esa botella en el escritorio de Jorge Enrique Pizano y qué fue lo que pasó con su hijo Alejandro.
Fuente: “El Tiempo” de Colombia / GDA