Sorpresivo, rápido, coordinado y sangriento. El sábado, mientras amanecía en Israel, numerosos militantes del grupo islamista palestino Hamás se infiltraban desde Gaza para perpetrar la peor masacre de civiles de la historia del país hebreo.
El ataque relámpago fue por aire, mar y tierra. La inteligencia israelí, una de las mejores del mundo, no detectó el plan. Mientras que su ejército, entre los más preparados del planeta, fue superado en el sur del país.
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Hasta este lunes, el balance de muertos superaba los 800 en Israel, mientras que el número de heridos estaba por encima de los 2.500.
¿Qué se sabe sobre la planificación y ejecución de este ataque de Hamás? En esta nota te lo contamos.
Una lluvia de cohetes y la valla fronteriza destruida
A las 6:30 de la mañana del sábado, cientos de cohetes empezaron a ser disparados desde Gaza hacia Israel. De manera paralela, la valla impenetrable fue destruida en varias de sus secciones.
Ese sábado era el sabbat judío. También se celebraba el Simjat Torá, uno de los días más alegres del calendario judío. El ataque coincidía con el 50 aniversario de la llamada guerra de Yom Kippur, que enfrentó a Israel contra Egipto y Siria.
¿Era raro que Hamás disparara cohetes contra Israel? La respuesta es no. Durante años lo hizo de manera regular, aunque había bajado en intensidad y frecuencia en los últimos años. En este punto, cabe recordar que la organización palestina controla Gaza desde el 2007, y es calificada como terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea.
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Pero a diferencia de ataques anteriores con cohetes, el gran número de proyectiles que disparó Hamas esa mañana, en un corto período de tiempo, hizo imposible que el sofisticado sistema de defensa de Israel, llamado Cúpula de Hierro, evitara que muchos proyectiles impactaran en zonas pobladas de Israel.
Las sirenas de ataque aéreo sonaban en el sur y este de Israel y en Tel Aviv, ubicada a 60 kilómetros de Gaza.
Según Hamás, en su primer ataque del sábado disparó 5.000 cohetes, mientras que el cálculo de Israel sostiene que fueron poco más de 2.000.
Como antecedente, la agencia AFP recuerda que en mayo del 2021, Hamás lanzó a Israel 4.360 cohetes en 15 días.
Mientras se daban los lanzamientos de cohetes y la Cúpula de Hierro respondía como podía, en tierra militantes de Hamás destruían con explosivos y con palas mecánicas varias secciones de la valla fronteriza para cruzar a Israel en camionetas, motos y a pie.
Antes, como avanzada, grupo cruzó a Israel volando en parapentes con motor. Estos tenían la misión de aseguran el terreno para que una unidad de comandos de élite pudiera asaltar el muro electrónico y de cemento fortificado construido por Israel para impedir la infiltración.
También hubo un plan de infiltración por mar, tal como mostraron imágenes divulgadas por Israel, donde se ven que los intentos de Hamás por hacer un desembarco son neutralizados con disparos de misiles.
En los puestos de control fronterizos que fueron vulnerados, los militantes de Hamás asesinaron a soldados israelíes.
Imágenes divulgadas por redes sociales dan cuenta de la operación coordinada tipo comando que llevaban adelante. Incluso en uno de los videos se ve a soldados israelíes, algunos armados y otros sin armas, que se refugian en un baño hasta que finalmente todos son asesinados.
Tras cruzar la frontera, la masacre comenzó en las ciudades israelíes.
De acuerdo con Israel, Hamás llevó sus ataques a 27 lugares diferentes del país, donde masacraban a mansalva a civiles y militares.
Según BBC Mundo, lo más lejos que penetró Hamás fue la ciudad de Ofakim, situada 22,5 kilómetros al este de Gaza.
Pero uno de los lugares donde se produjo la peor matanza estaba muy cerca de la frontera, en el kibbutz Reim, donde se realizaba un festival de música electrónica que fue atacado a disparos. Murieron al menos 260 personas, mientras que un número indeterminado fueron secuestrados y llevados a Gaza.
El domingo, tanto Hamás como la Yihad Islámica dijeron que tienen en su poder a al menos 130 rehenes, entre civiles y militares. Varios de ellos son extranjeros.
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¿Cómo se planeó la operación y qué tiene que ver Irán?
Kobi Michael, investigador del centro de reflexión INSS de Tel Aviv, le dijo a la agencia AFP que el ataque tomó por sorpresa a Israel.
“Es un gran fracaso para Israel y un gran éxito para Hamás... No estábamos preparados”, aseguró.
Agregó que hubo una meticulosa preparación. “Para lanzar una operación de este tipo, se necesita mucha preparación, planificación, coordinación, y contar con perspectivas y objetivos importantes”.
¿Tuvo ayuda externa Hamás? El diario estadounidense The Wall Street Journal aseguró el domingo que Irán ayudó a preparar el ataque.
Según ese medio, desde agosto miembros de la Guardia Revolucionaria de Irán ayudaron a planificar el ataque e incluso habrían dado luz verde para su inicio. El diario basa su información en fuentes de Hamás y de Hezbolá, agrupación del Líbano.
Los detalles de la operación se habrían afinado en reuniones celebradas en Beirut, Líbano, entre oficiales iraníes, miembros de Hamás y representantes de Hezbolá.
Por ahora, el Gobierno de Estados Unidos dice que no hay pruebas de la supuesta implicación de Irán en el ataque.
“Aún no hemos visto pruebas de que Irán haya dirigido o esté detrás de este ataque en particular”, dijo el domingo en una entrevista con CNN el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken.
Un día antes, el Departamento de Estado de EE.UU. negó que los fondos iraníes que Estados Unidos desbloqueó el mes pasado como parte de un intercambio de prisioneros con Irán hayan sido utilizados para atacar Israel.
Por su parte, el Gobierno de Irán dijo el domingo que apoya la “legítima defensa de la nación palestina” y rechazó las acusaciones sobre su eventual papel en la operación.
Según un experto consultado por la agencia AFP, las armas que posee Hamás proceden de Irán, de Siria antes de la revolución iniciada en el 2011, de la Libia post-Gadafi y de otros países de Medio Oriente.
También tiene armas ligeras procedentes de China y de la antigua Unión Soviética. Entre el arsenal de Hamás hay que contar las armas robadas o incautadas durante los combates con el ejército de Israel. El grupo militante también posee drones y lanzagranadas.
La mayoría de sus cohetes se fabrican localmente. Son “sistemas de misiles no guiados”, que “no requieren tecnología avanzada” y son poco precisos, explicó a AFP Elliot Chapman, experto en Oriente Medio en la compañía británica de inteligencia Janes.
La estrategia del engaño
Según un informe de la agencia Reuters, el devastador ataque de Hamás en suelo israelí fue posible gracias a una cuidadosa campaña de engaño por parte de los islamistas que hizo que la inteligencia de Israel no detectara el plan.
Esta estrategia de engaño, iniciada por lo menos hace dos años, convenció a Israel de que Hamás ya no quería luchar, refiere Reuters.
Una fuente le dijo a Reuters que mientras se hacía creer a Israel que estaba conteniendo a un Hamás, los combatientes del grupo estaban siendo entrenados y adiestrados, a menudo a la vista de todos.
El informe de Reuters también tiene fuentes de seguridad israelíes.
“Hamas utilizó una táctica de inteligencia sin precedentes para engañar a Israel durante los últimos meses, dando la impresión pública de que no estaba dispuesta a entrar en una lucha o enfrentamiento con Israel mientras se preparaba para esta operación masiva”, dijo una fuente cercana a Hamás a Reuters.
La agencia británica sostiene que como parte de sus preparativos, Hamás construyó una rélica de territortio israelí en Gaza donde practicaron un aterrizaje militar y se entrenaron para asaltarlo. Esa maniobras fueron grabadas en video.
“Israel seguramente las vio, pero estaban convencidos de que Hamás no quería entrar en una confrontación”, declaró la fuente relacionada con Hamás.
Como parte de su estrategia, dice Reuters, Hamas trató de convencer a Israel de que le importaba más garantizar que los trabajadores de Gaza tuvieran acceso a puestos de trabajo al otro lado de la frontera y que no tenía interés en iniciar una nueva guerra.
Una fuente de seguridad israelí reconoció a Reuters que los servicios de seguridad de Israel fueron engañados por Hamas. “Nos hicieron creer que querían dinero”, dijo la fuente. “Y todo el tiempo participaron en ejercicios-simulacros hasta que se desbocaron”.
Reuters anota que como parte del engaño, en los últimos dos años Hamás se abstuvo de realizar operaciones militares contra Israel, incluso cuando otro grupo armado islamista con base en Gaza, la Yihad Islámica, lanzó una serie de ataques con cohetes sobre territorio israelí.
Otra segunda fuente de seguridad israelí afirmó a Reuters que hubo un periodo en el que Israel creía que el líder de Hamás en Gaza, Yahya Al-Sinwar, estaba preocupado por gestionar el territorio “en lugar de matar judíos”. Al mismo tiempo, Israel desvió su atención de Hamás al impulsar un acuerdo para normalizar las relaciones con Arabia Saudita, añadió.
¿Qué viene ahora?
Israel ha prometido venganza, acabar con Hamás, sacarlo del poder en Gaza. Y ha adelantado que será una guerra larga.
Pero de acuerdo con Reuters, el plan del primer ministro Benjamin Netanyahu para castigar a Hamás tiene una gran dificultad: los más de 100 israelíes y extranjeros capturados como rehenes durante la operación de Hamás y que han sido llevados a Gaza.
Entre los rehenes hay soldados, ancianos, mujeres y niños israelíes. Son moneda de cambio de Hamás para lograr beneficios o para acordar un alto el fuego que les favorezca.
Ya sucedió. Por ejemplo, en el 2011 Israel intercambió a cientos de prisioneros palestinos para lograr la liberación de un solo soldado israelí, Gilad Shalit, que había estado secuestrado en Gaza durante cinco años.
Hoy Hamás tiene a más de 100 israelíes capturados. Entonces, cabe preguntarse si los feroces bombardeos de Israel sobre Gaza, que ya han dejado más de 500 muertos, se sostendrán en el tiempo. Y si una operación terrestre masiva está en camino.
“La cruel realidad es que Hamás tomó rehenes como póliza de seguro contra cualquier acción de represalia israelí, en especial de un ataque masivo terrestre, y para luego canjearlos por prisioneros palestinos”, dijo a Reuters Aaron David Miller, miembro del Fondo Carnegie para la Paz Internacional.
“¿Esto limita las posibles respuestas militares de Israel? Si la cifra de rehenes es grande, ¿cómo no lo haría?”, agregó.
Israel ha dicho que actuará para liberar a los rehenes, que destruirá la “infraestructura terrorista” de Hamás y que garantizará que ningún grupo terrorista en Gaza pueda volver a dañar a ciudadanos israelíes.
Israel se enfrenta ahora a dos dilemas: un intento de rescate de los rehenes que podría terminar mal. O una prolongada negociación con Hamás para un intercambio de prisioneros. En ambos casos, el grupo islamista cantaría victoria.
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