El Estado Islámico ha difundido un audio en el que se ve la fotografía del rehén Kenji Goto y se escucha su voz. En el audio, Goto asegura que su compañero, Haruna Yukawa, fue decapitado luego del plazo ofrecido por los extremistas al gobierno japonés.Seguir a @Mundo_ECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
En el audio, Goto culpa al gobierno de Shinzo Abe por la muerte de su compañero y pide a sus familiares y amigos que no permitan que eso pase con él.
Además, el Estado Islámico habría dejado de exigir US$200 millones por la vida del japonés. Ahora pide que liberen a Sajida al Rishawi, una terrorista encarcelada en Jordania.
A continuación, la traducción del audio emitido hoy.
“Están viendo la foto de mi compatriota Haruna (Yukawa) tendido en la tierra del califato islámico. Están advertidos, tuvieron una fecha límite y mis captores están aplicando sus amenazas.
(Shinzo) Abe, tú mataste a Haruna. No tomaste en serio las amenazas de mis captores en serio y no actuaste en las 72 horas que te dieron.
Ringo (sic) mi amada esposa, te amo y extraño a mis dos hijas. Por favor, no permitan que Abe haga lo mismo en mi caso. No se rindan.
Familia, amigos y colegas de la prensa independiente sigan presionando a nuestro gobierno. La demanda es sencilla. Están siendo justos. Ellos ya no quieren dinero así que no se preocupen por financiar al terrorismo. Ellos quieren liberar a su hermana presa Sajida al Rishawi. Es simple.
Ustedes le entregan a Sajida y yo seré liberado. Hasta el momento aún parece posible.
Nuevamente, me gustaría repetir lo facil que es salvar mi vida. Ustedes le entregan a su hermana, presa bajo el régimen jordano, y yo seré liberado inmediatamente. Yo por ella.
Ringo, estas podrían ser mis últimas horas en este mundo y quizás sea un hombre muerto. No dejes que estas sean mis últimas palabras. No dejes que Abe también me mate.“