Este sustantivo masculino se registra en la última edición del Diccionario de la Real Academia Española (2014), circunscrito al Perú, Guatemala, República Dominicana, Puerto Rico, Chile y la Argentina, con el sentido de “aclimatación de un ser vivo”. Véase un ejemplo de nuestro país: “En el Perú, los pobladores precolombinos practicaron el riego y el aclimatamiento o domesticación de las especies” (Gestión del agua y crisis institucional, Lima, 1993, p. 195). Tanto aclimatamiento como su equivalente aclimatación son derivados de clima, voz de origen grecolatino que significaba ‘latitud, región’.