Esta expresión, típica de la lengua oral peruana, tuvo sin duda, en un principio, entonación interrogativa: ¿cómo se llama? Hoy es una muletilla empleada para ganar tiempo mientras se busca el término adecuado para continuar una exposición. En la Argentina se ha soldado en un sustantivo: el (o la) comosellama es la persona cuyo nombre se desconoce o no se quiere mencionar. En España, ¿cómo se llama? equivale a ¿cuánto cuesta? (El Comercio, Lima, 6/2/2008).