Esta locución verbal que parece exclusiva de nuestra lengua familiar y coloquial mezcla un quechuismo (papa) con un aztequismo (camote). La expresión hace referencia a una confusión total. Véase un ejemplo de la revista limeña Caretas, en referencia al expresidente Fujimori: “… ha tratado de precisar que una cosa es la deuda pública (la del gobierno) y otra cosa es la deuda total (que incluye la deuda pública y la deuda privada), sin reparar en que continuamente mezcla papas con camotes (N.° 1587)”.