Esta locución adverbial se consigna en el académico Diccionario de americanismos (2010), comprendida entre los usos cultos pero espontáneos de Méjico, Costa Rica, Panamá, Chile, Bolivia y Perú. En su libro Los últimos días de La Prensa, Jaime Bayly pone en boca de un personaje: “Aunque sea trae pan por mientras, pues, Compadrito...” (Barcelona 1996, p. 259). Este singular por mientras equivale —obviamente— a las locuciones de la lengua general mientras tanto o entre tanto.