Este adjetivo muy familiar, derivado del infinitivo menos usado desconchinflar(se), es de origen incierto, pero tiene una amplia área de uso en América (Perú, México, Cuba, etc.). Se entiende como ‘estropeado’, ‘deteriorado’, y referido a persona, ‘decaído’. En el suplemento Ellos & Ellas de la revista limeña Caretas(n.° 2106) se lee esta curiosa frase: “La cuidada melena de Alberto se desconchinfló para volver a su regio estado natural en cuestión de segundos”.