En una operación combinada en la que intervinieron agentes de distintas unidades especializadas de la policía de Ica y Lima, se logró entre la tarde y la noche del último miércoles la captura de una banda de sicarios que planeaba una serie de secuestros y extorsiones.
En poder de los delincuentes se encontraron dos ametralladoras Mini-Uzi, cuatro pistolas, un revolver, varios silenciadores, abundante munición y cacerina. Además, dos motos y un automóvil presuntamente robados, dos chalecos antibalas, placas falsificadas, siete celulares y droga que escondían en dos viviendas ubicadas en el peligroso sector conocido como El Cubil, en el distrito de Pueblo Nuevo en Chincha.
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(Foto: José Rosales Vargas)
La banda, integrada por cinco hombres y dos mujeres, pretendía perpetrar el secuestro de connotados empresarios de Chincha, extorsionar a varias empresas constructoras e inmobiliarias de esta localidad y asaltar de una conocida entidad bancaria, según los planos a mano que los delincuentes tenían también en su poder.
TERCERA BANDA DESARTICULADA EN EL AÑOLuego de la exitosa operación policial, la tercera que asestan en lo que va del año a una de las peligrosas bandas que se habían asentado en esta provincia iqueña, se identificó a los delincuentes Jean Pool de la Cruz López (19), Ricardo Tasayco Torres (21), Edson Puma Herrera (31), Martín Almeyda Apolaya y Bairon Ormeño Martínez (ambos de 28 años), así como Milagros López Barrutia (42).
Estos seis delincuentes fueron detenidos casi a las 4 de la tarde después que los agentes incursionaran en un inmueble ubicado en el asentamiento humano San Andrés, en el distrito de Pueblo Nuevo, y en el que intervino el titular de la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Chincha, doctor Óscar Quiñones Romero.
En una operación realizada una hora después, el grupo combinado integrado por efectivos de inteligencia de Ica y de las direcciones de Inteligencia e Investigación Criminal de Lima incursionaron en otro inmueble del asentamiento humano Fe y Alegría, logrando la captura de Carmen Flores López (23), que guardaba parte del armamento incautado.
Tras la desarticulación de esta peligrosa banda, denominada por la policía como 'Los sicarios de Chincha', estos fueron trasladados bajo un impresionante despliegue policial hasta la comisaría sectorial de Chincha.