El expresidente Alejandro Toledo -investigado por corrupción- debe entregarse este viernes a las 9 a.m. (11 a.m. hora de Perú) a las autoridades norteamericanas para que sea recluido en una cárcel hasta su extradición al Perú, en cumplimiento de la orden del juez Thomas S. Hixon, de la Corte del Distrito Norte de California de Estados Unidos (EE.UU.).
Tras rechazarse los diversos recursos que Toledo presentó para evitar su extradición por el caso Interoceánica y ante un pedido del propio Gobierno norteamericano, Hixon revocó la fianza del exmandatario y le devolvió su custodia al Cuerpo de Alguaciles de EE.UU. (United States Marshals Service). De acuerdo a la resolución, debe presentarse en la oficina del magistrado, ubicada en el piso 20 de Golden Avenue 450, San Francisco.
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La fiscalía peruana pide 20 años de cárcel para Toledo por los presuntos delitos de lavado de activos y colusión. Lo acusa de recibir un soborno aproximado de US$ 35 millones a cambio de licitar a favor de la empresa brasileña Odebrecht el proyecto de construcción de los Tramos 2 y 3 de la Carretera Interoceánica.
El 9 de febrero de 2017, el Poder Judicial dictó 18 meses de prisión preventiva contra el otrora líder y fundador de Perú Libre y luego de seis años se acerca cada vez más el día en que responderá ante la justicia peruana.
Tras conocerse la decisión del juez contra Toledo, el ministro de Justicia, José Tello, reiteró que el penal de Barbadillo tiene capacidad para albergar al expresidente una vez que se concrete su traslado desde Estados Unidos.
“Finalmente depende de una junta, de un comité colegiado del INPE que determina dónde va cada recluso. Podemos inferir que sería Barbadillo, pero finalmente esta junta es la que se pronuncia e indica que tiene que ir a este penal haciendo una valoración objetiva de los delitos cometidos, condición del recluso y todo lo demás”, expresó.