El Partido Morado, que lidera el candidato presidencial Julio Guzmán, vuelve a llevar en su lista congresal a Jonás Angulo, que registra una sentencia por violencia familiar. Postuló en los comicios extraordinarios 2020, pero fue invitado a renunciar tras revelarse dicho antecedente.
La Unidad de Periodismo de Datos de El Comercio revisó las hojas de vida de los candidatos que se presentan a la contienda electoral en busca de uno de los 130 curules en el Parlamento. Dicha búsqueda arrojó que el Partido Morado lleva en sus listas congresales a 13 postulantes que registraron antecedentes penales y civiles en sus hojas de vida. Entre ellos figura Jonás Angulo, candidato por Pasco, quien registra una sentencia del 2011 por violencia familiar.
-Cambio de postura-
En las elecciones congresales extraordinarias 2020, el Partido Morado inscribió como cabeza de lista de Pasco a Jonás Angulo. Un informe de este Diario sobre los candidatos con antecedentes reveló que registraba una sentencia por violencia familiar.
Tras las críticas que recibieron por sus candidatos con antecedentes, el Partido Morado emitió un comunicado donde informaba que habían pedido la renuncia de Jonás Angulo Travezaño (Pasco) y Jimmy Isidro Villanueva (Áncash).
De los dos candidatos, solo Angulo cumplió con el pedido y renunció a la contienda. Sin embargo, un año después vuelve a aparecer. Se trata de un profesor de la Institución Educativa Nº 31774 San Andrés en Pasco, que en el 2010 logró ser elegido como regidor provincial. A inicios del 2019 recién se inscribió en el Partido Morado.
¿Pero por qué el partido de Julio Guzmán cambió de postura y ahora postula a un candidato al cual le pidió su renuncia el año pasado?
El propio Jonás Angulo justifica su postulación asegurando que no existe impedimento legal. “El año pasado renuncié porque el presidente del partido, el comité nacional, pidieron que renuncie. Yo asumí no haber informado al partido. Pero a mí nadie me ha descubierto la sentencia, yo lo he declarado [en la hoja de vida], hay que ser claros”, indicó a El Comercio.
Respecto a la denuncia sobre violencia familiar, el candidato del Partido Morado refirió que sucedió hace 10 años y que fue “circunstancial”. “Asumí mi responsabilidad, pedí perdón [...] En mi caso hubo un hecho circunstancial, lo que se da tal vez en muchas familias. No he cometido un delito, como muchos piensan, de maltrato”, alegó.
Cuando le insistimos que la denuncia era por lesiones por violencia familiar, el candidato añadió: “Así se tipifica la norma, un hecho circunstancial, una discusión, y tú sabes, a veces los momentos salen y actúan, como toda mujer, hacen respetar sus derechos. Yo, en su momento, la he felicitado incluso. Hoy tengo una buena amistad con ella”.
Tal como el propio Angulo consigna en su hoja de vida, esta sentencia produjo un proceso civil donde se determinó la “suspensión de la cohabitación”. El artículo 289 del Código Civil establece que el juez suspende este deber “cuando su cumplimiento ponga en grave peligro la vida, la salud o el honor de cualquiera de los cónyuges o la actividad económica de la que depende el sostenimiento de la familia”.
En la hoja de vida del candidato del Partido Morado también figura una sentencia civil por pensión de alimentos. La fecha es del 2012, un año después de la sentencia por violencia familiar.
-Postura partidaria-
En declaraciones a este Diario, el secretario general y candidato por Lima, Rodolfo Pérez, sostuvo que Jonás Angulo ya está rehabilitado y que renunció en el 2020 porque debía explicar bien su caso en su región Pasco.
“No es un agresor. Está rehabilitado y en buena situación con su familia. Nosotros estamos a favor del enfoque de género, pero el enfoque también tiene debe ser que quienes han padecido esta situación, tienen la oportunidad de reconstruir su vida familiar. Este un caso especial y excepcional”, afirmó Pérez.
De otro lado, Pérez indicó que los registros de demandas penales y civiles deberían ser públicos. Según dijo, en varios casos recién se enteran de los procesos al momento de la inscripción. “Se les consulta [antes de inscribirlos] pero de una u otra manera, es en el momento de inscripción que comentan su situación. Los procesos de democracia son rápidos, y el partido no tiene absoluto control de esto. Además, ¿cómo excluyes a candidatos con demandas civiles si esto no está impedido en la norma? Si emitimos un reglamento en ese sentido podría ser impugnado”.