La nueva Chevrolet Silverado llegó al Perú este 2023 para competir en el mercado de las pick-up tamaño grande, es decir, para ser una alternativa frente al Ford F-150 y Ram 1500. Para conocer más sobre este vehículo, la probamos por más de 600 kilómetros tanto en ciudad como en carretera. Aquí te contamos nuestras impresiones, sus puntos destacables y los que tiene por mejorar.
La versión específica que conducimos es la Silverado Z71 con el paquete Trail Boss, el único que llega al país. Nuestra experiencia parte de conducir esta pick-up en la ciudad de Lima en situaciones de mucho tráfico y también en carretera, ya que manejamos 550 kilómetros en un viaje de ida y vuelta hacia Tarma y alrededores en Junín.
LEE TAMBIÉN: Todo lo que debes saber de la nueva pick-up Montana de Chevrolet
El Chevrolet Silverado, imponente y seguro para la ciudad
En nuestro primer contacto con el Silverado, la pick-up impresiona por sus dimensiones colosales y por ser uno de los pocos vehículos con motor V8 aspirado que se comercializa en el país. Una vez que accionamos el encendido remoto, el sonido que produce el bloque de ocho cilindros transmite mucho poder y de seguro, es música para los oídos de los más puristas. Así es, los más tradicionales o puristas gustan de este pick-up porque no sigue la tendencia del “downsizing”, la cual apela por reducir la cilindrada y agrega un turbocargador, sino que mantiene la clásica aspiración natural.
En cabina, la sensación de espacio es inmensa. Considerando una estatura de 1.72 cm, el espacio que me queda debajo del volante es holgado y de igual modo, tengo mucho espacio sobre la cabeza. Asimismo, el pasajero delantero y los ocupantes de la plaza trasera tienen un amplio espacio para estirar las piernas y viajar cómodamente. Hay que tomar en cuenta que el vehículo está diseñado para el mercado norteamericano, en donde la estatura promedio es superior al resto de países en la región, y por lo tanto, el habitáculo resulta enorme para el latino promedio.