Esta es una realidad de la que se habla poco y se escribe menos. Se trata del acoso cibernético que se da al interior de las parejas, cuando uno le pide sus contraseñas de redes sociales al otro, su clave de laptop o de correo, como un supuesto signo de confianza. En verdad, es todo lo contrario: es una señal de inseguridad pues no respeta los espacios personales y el derecho a un mundo interno. Es una forma de violencia que no respeta el registro de llamadas o el historial de navegación. Para hacer esto pueden quitarle el celular a su pareja mientras duerme o le instalan un stalkerware.
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“El stalkerware es un software espía que cualquier persona con acceso a Internet puede comprar en una tienda de aplicaciones. Se instala de forma manual en los dispositivos, es decir, hay que tener acceso físico al teléfono de la víctima”, le cuenta a Somos Andrea Fernández, gerente general, región Sur de América Latina, de la empresa de ciberseguridad Kaspersky.
Una vez instalado este software el acosador accede a un gran número de datos personales de forma remota: mensajes de texto, información de llamadas, localización GPS, fotos, vídeos, historial de navegación o cualquier actividad en redes sociales, todo esto, sin que la víctima haya dado su consentimiento y, por supuesto, sin que sepa que está siendo espiada.
Estas aplicaciones son vendidas bajo la apariencia de, por ejemplo, soluciones para monitorear la actividad online de niños y/o empleados. “Es importante resaltar que el stalkerware no es igual a las aplicaciones de control parental ya que estos últimos nunca ocultan su actividad ni su propósito. De hecho, los usuarios siempre son notificados que sus datos son requeridos por un tercero. Nada se oculta. En el caso del stalkerware, la herramienta cuenta con mecanismos que la mantienen oculta en el dispositivo con lo cual detectarla es complicado. No hay ninguna intención de hacerlo visible”, cuenta Fernández.
Kaspersky presento este mes los resultados de su estudio “Acoso Digital en las Relaciones”, que busca conocer más sobre qué tanto saben los usuarios sobre este software espía y averiguar más detalles sobre su uso en América. Las estadísticas referidas a nuestro país son reveladoras.
· El 76% de los peruanos encuestados considera que no es aceptable monitorear a su pareja sin su consentimiento. En otros países de la región este sentimiento está más enraizado (81% los argentinos y 82% los chilenos).
· A más de la mitad de los peruanos (56%) le preocupa que su pareja viole su privacidad digital, haciendo uso de los programas de stalkerware. Nuevamente, en otros países esta preocupación es menor (48% los argentinos y 48% los chilenos).
· En Perú solo 6% de los encuestados considera que en algunas circunstancias es aceptable monitorear a su pareja sin su consentimiento (5% los argentinos y 8% los chilenos).
Estas circunstancias son:
o Si creyeran que su pareja les está siendo infiel 57%. (55% los argentinos y 69% los chilenos)
o Si ese espionaje o seguimiento está relacionado con la seguridad de su pareja 52%. (56% los argentinos y 46% los chilenos).
o Si creyeran que su pareja está involucrada en una actividad delictiva 45%. (50% los argentinos y 63% los chilenos).
· Además, en Perú el 17% de los encuestados (11% de los argentinos y 14% de los chilenos) reconoció que su pareja le ha solicitado que instalen una aplicación de monitoreo y 30% de las personas que dieron esta respuesta admitió que ha sufrido abusos por parte de sus compañeros sentimentales. (30% de argentinos y 28% de los chilenos).
“Para nosotros es importante presentar los resultados de esta encuesta porque 26% de las personas consultadas en el Perú admitió que no saben qué es el stalkerware y la idea es concientizar a las personas de que este tipo de programas existen y sepan: reconocer si están siendo afectadas y qué acciones deben seguir”, precisa Fernandez, de Kaspersky.
América Latina se destaca como la región en donde espiar a la pareja es menos aceptable (8%), resultados que contrastan con la cifra de Asia-Pacifico, donde 24% de los consultados estaría de acuerdo en realizar este seguimiento, mientras que, en Europa, la cifra es de 10%.
Stalkerware: las mujeres son más víctimas
La privacidad, tanto de hombres como de mujeres, es igual de importante. Sin embargo, está documentado que son ellas quienes en la actualidad siguen sufriendo múltiples formas de acoso y el stalkerware está asociado a los casos de violencia doméstica y maltrato psicológico de las víctimas. Por ello es que para Kaspersky resulta tan relevante dar a conocer este estudio y reiterar que el stalkerware no debe ser visto únicamente desde una perspectiva técnica, sino como una forma más de abuso hacia las mujeres.
Las siguientes son recomendaciones de Kaspersky para enfrentar el problema del stalkerware:
¿Cómo puedo saber si mi teléfono está siendo monitoreado?
Hay señales que pueden ser de gran utilidad en caso de que alguien sospeche que está siendo víctima de este acoso y que su teléfono pudiese estar afectado:
● Aumento del uso de los datos. Debido a que las aplicaciones espía requieren acceso a Internet para poder transferir los datos registrados.
● Batería deficiente y rendimiento lento por la constante actividad en segundo plano.
● Detectar que en tu dispositivo existen aplicaciones desconocidas o que no recuerdes haber instalado.
● Notar ruido de fondo sospechoso, es decir si escuchas ruidos extraños durante las llamadas.
● Si la gente conoce tu información privada, por ejemplo, fotos que has hecho recientemente, los lugares que has visitado u otra información personal, es posible que hayan tenido acceso a estos datos a través de un programa de acoso.
¿Qué hacer si sospecho que soy víctima de este software espía?
Si alguien sospecha que está siendo víctima de stalkerware, debe saber que, aunque un programa espía puede ser difícil de detectar y eliminar, esto no es imposible. Sin embargo, ya que este puede alertar al abusador, se deben tomar varias consideraciones antes de deshabilitarlo.
● No te apresures a remover el stalkerware si lo encuentras en tu dispositivo, ya que el abusador lo podrá saber, lo que puede representar un riesgo potencial para la seguridad física, pues la persona puede intensificar sus comportamientos abusivos como respuesta.
● Es importante ponerse en contacto con las autoridades locales y las organizaciones que apoyan a las víctimas de violencia doméstica para obtener asistencia y planificar pautas de seguridad. Como comentamos anteriormente, Luchadoras es una ONG mexicana especializada en atender a víctimas de violencia digital; a pesar de que ellas están basadas en México, pueden asistir inicialmente a alguien que requiera ayuda. Ellas pueden ser contactadas a través de sus redes sociales en Instagram y Facebook.
● Antes de eliminar el stalkerware es importante pensar en si se necesita conservar alguna evidencia para fines legales.