The Game Awards es la gala más importante de los videojuegos y esta semana premiará a lo mejor de dicha industria, incluyendo el trofeo de “Juego del Año”, el más codiciado de la ceremonia.
El evento se celebra desde 2014 y, aunque los resultados no han sido del agrado de todos, buena parte de los títulos que se llevaron el reconocimiento mayor han tenido una influencia notable en el rubro, tanto a nivel de desarrollo como en el ámbito comercial. Aquí, un repaso a los tres últimos ganadores.
-“OVERWATCH” (2016)-
El título de Blizzard fue una elección relativamente inusual, teniendo en cuenta que estaba enfocado en el multijugador. Más allá de ese detalle, tuvo un impacto innegable dándole vitalidad al género de los ‘shooters’ en el periodo anterior a la masificación definitiva de los ‘battle royale’.
“Overwatch” se distanciaba de otros exponentes del género por su sistema basado en héroes (y villanos), cada uno con características únicas y un aporte concreto en las partidas en línea.
Los personajes eran carismáticos y contaban con trasfondos atractivos, pero esto chocaba con el hecho de que el juego no tuviera una campaña o modo historia. Lo llamativo es que su universo era construido de forma creativa a través de cortos animados, la página web de la franquicia y un uso solvente de las redes sociales. Todo eso como parte de una solvente estrategia de mercadotecnia.
A lo anterior se añadía lo más importante para cualquier videojuego: “Overwatch” era divertido y cada sesión brindaba un importante abanico de posibilidades, a nivel individual y en las estrategias colectivas.
La irrupción de “Overwatch” también tuvo un impacto significativo en los e-Sports. Desde su lanzamiento, el juego siempre se ha mantenido como unode los deportes electrónicos más populares y su liga profesional (Overwatch League) cuenta con equipos de China, Estados Unidos, Francia, Canadá, Corea del Sur y Reino Unido.
A fin de cuentas, el título terminó de definir el subgénero de ‘hero-shooters’ y a día de hoy sigue siendo su máximo exponente.
Los candidatos a los que derrotó en The Game Awards 2016: “Battlefield 1”, “Doom”, “Inside”, “Titanfall 2” y “Uncharted 4”.
-“THE LEGEND OF ZELDA: BREATH OF THE WILD” (2017)-
Originalmente pensado para la Wii U –de la cual fue el último título– llegó con el rótulo de ser el juego de lanzamiento de Nintendo Switch. “Breath of the Wild” tuvo el gran mérito de romper con gran parte de las convenciones de una franquicia tan querida como “The Legend of Zelda”, pero sin perder la esencia de esta.
Su premisa era otorgar una libertad casi absoluta al jugador a la hora de explorar el inmenso mundo abierto en el que tenía lugar el juego. De forma literal, prácticamente no había montaña, árbol o construcción que el usuario no pudiera escalar y cada desplazamiento traía consigo montones de secretos por descubrir. Debe aclarase que la pulida física del juego contribuía en gran medida a todo lo citado.
La mitología, acertijos y combate de esta serie estaban presentes en “The Legend of Zelda: Breath of the Wild”, aunque en proporciones distintas para cada caso. También se dejaban ver los elementos básicos de la historia de la saga, aunque se abandonaba en gran medida la linealidad de la narrativa para permitir al jugador hacer todo lo que su curiosidad le dictara.
Críticos e incluso los fans más fervorosos agradecieron el cambio. Si complacer a todo el mundo es difícil, el juego salió airoso de esa complicada tarea.
Los candidatos a los que derrotó en The Game Awards 2017: “Horizon Zero Dawn”, “Super Mario Odyssey”, “Persona 5” y “PlayerUnknown’s Battlegrounds”.
-“GOD OF WAR” (2018)-
Una de las franquicias exclusivas de Sony volvió por todo lo alto en 2018 y con una gran cantidad de novedades. El nuevo título no solo daba continuidad al difuso final de “God of War III” (2010), sino que también apostaba por una historia más humana.
El más reciente “God of War” comparte su nombre con la primera entrega, pero tomó distancia de sus predecesores con un sistema de combate más directo y refinado, además de un notable apartado gráfico, incluso por encima de la media de los títulos de mayor presupuesto .
Kratos seguía siendo el centro de la jugabilidad, pero su hijo y compañero, Atreus, añadía otro foco de atención al momento de abordar las diversas situaciones que el título planteaba. Este último personaje no solo tenía relevancia en las mecánicas de juego, sino que también era un elemento fundamental de la historia y el gran responsable de mostrar la faceta más humana del protagonista.
En un periodo en el que muchos grandes exclusivos coqueteaban con adaptarse a los mundos abiertos, “God of War” apostó por mantener la acción más tradicional y centrarse en su historia. No solo eso, también dejó claro que el futuro de los videojuegos no necesariamente está ligado al multijugador en línea y los micropagos, sino que todavía hay espacio para títulos lineales de calidad superlativa.
Con más de 10 millones de copias vendidas, es claro que fue una apuesta redonda.
Los candidatos a los que derrotó en The Game Awards 2018: “Red Dead Redemption 2”, “Spider-Man”, “Assassin’s Creed: Odyssey”, “Celeste” y “Monster Hunter: World”
DATOS
- Los nominados para “Juego del Año” en la edición de 2019 son: “Control”, “Death Stranding”, “Super Smash Bros. Ultimate”, “Resident Evil 2 Remake”, “Sekiro: Shadows Die Twice” y “The Outer Worlds”.
- The Game Awards tiene más de 30 categorías de premios y cualquiera puede votar en la página oficial. Las votaciones están cerradas.
- Geoff Keighley, organizador de la premiación, indica que la edición de 2019 tendrá una decena de anuncios de nuevos proyectos de videojuegos.
- “Overwatch” y “The Legend of Zelda Breath of the Wild” tienen secuelas en desarrollo.