Costa Rica, La Nación/GDA
“Hay un debate entre si la personalidad se determina desde que nacemos, por naturaleza, o si la crianza y lo que vivimos es lo que nos la da. En esto hay que decir que, aunque la crianza sí modela algunos rasgos, la personalidad es algo muy propio de cada persona, por naturaleza. Solo así explicamos que dos hermanos con la misma crianza sean tan diferentes”.Seguir a @tecnoycienciaEC !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
De esta forma, el experto en comportamiento humano, Pete Cabrera, definió una de las variables que considera determinantes en la forma en la cual actuamos: nuestra personalidad.
“Por algo dos personas reaccionan de formas muy distintas ante una misma situación, u otras pueden llegar a reaccionar de una misma manera, pero con motivaciones muy diferentes”, añadió el especialista.
Cabrera utiliza el modelo DISC, que establece cuatro personalidades básicas: dominante, influyente, concienzudo y estable. Una persona puede ser un tipo definido de estos cuatro o tener una combinación.
1) El dominante es extrovertido y está más orientado a los objetivos que a las personas. Su conducta está orientada a la acción, rápida solución de problemas y toma de decisiones. Su necesidad es tener el control, si siente que lo pierde, es iracundo, impaciente e intolerable.
2) El influyente es extrovertido y su comportamiento está orientado a la gente. Es el entusiasta, optimista, le gusta el contacto con la gente, la variedad. Trabaja bien en equipo y busca hacer las cosas de forma distinta. Si se sale de balance, puede no mantener secretos o ser irresponsable.
3) El concienzudo es introvertido y su comportamiento está orientado a objetivos. Trabaja mejor con datos y en solitario, que con otras personas. Es perfeccionista, crítico y no le gusta lidiar con problemas de otras personas. Necesita orden; si no lo hay, hay caos. Puede ser sarcástico.
4) Finalmente, el estable es introvertido y su comportamiento está orientado a las personas. Sereno, atento, le gusta resolver conflictos y ser la voz que llama a la paz. Mide entornos y se asegura de que las personas se sientan cómodas. Su mayor necesidad es la paz, si la pierde, puede entrar en ansiedad.
Cabrera no es el único que apoya esta tesis. Un estudio de la Universidad de Washington (EE.UU.) y de la Universidad de Parma (Italia), expuso en el 2004 que la personalidad se moldea desde el vientre materno.
El reporte, publicado en la revista Journal of Psychology, determinó que nuestra personalidad viene marcada y predeterminada en el momento de nacer, dependiendo de nuestra estructura cerebral.
Para llegar a esas conclusiones, los investigadores estudiaron los cerebros de 85 personas que habían sido previamente clasificadas en las cuatro categorías básicas de personalidad. Se utilizó un escáner cerebral avanzado, capaz de notar diferencias en el volumen cerebral con una exactitud de hasta un milímetro cúbico.
Al revisar los resultados, los científicos observaron que hay una relación directa entre la personalidad del individuo y el tamaño de áreas muy específicas dentro del cerebro, la mayor parte de ellas relacionadas con la forma en que nos comportamos con los demás.
Utilidad
Esta teoría puede ser aplicada a cualquier área de la vida o a cualquier tipo de relación interpersonal. Sin embargo, en los últimos años ha sido muy utilizada en vínculos laborales.
“Conocerse a uno mismo y sus debilidades es vital para reaccionar de mejor forma ante la presión. Conocer las otras personalidades nos ayuda a tener una mejor relación con los compañeros y a obtener mejores resultados”, concluyó Cabrera.