No hay amor sin parque. Lugar de promesas, declaraciones y arrumacos. Si algún parque sabe bien de estos asuntos, es el que diera forma en 1993 el artista Víctor Delfín, durante la gestión en Miraflores del recordado Alberto Andrade. Desde entonces, el Parque del Amor es símbolo e imán de parejas que llegan de todas partes y encuentran frente al mar, y en la compañía de esos dos amantes que se besan eternamente, el escenario ideal para vivir su idilio.
Conoce su historia y otros detalles.