Jefferson Farfán es un exitoso jugador peruano que durante 7 años actuó en la competitiva liga alemana con el FC Schalke 04 y que ahora se ve obligado a priorizar el futuro económico en la parte final de su carrera.
Según el club azul, el interés por cambiar radicalmente de aires parte del entorno del jugador. “Hace unos días el representante de Jefferson Farfán se reunió con nuestro club para transmitirnos el interés que tiene el Al-Jazira Club de Abu Dhabi en hacerse con los servicios del jugador peruano”, publica en Facebook la institución alemana que no ha puesto mayor reparo en negociar a Jefferson por una suma importante de dinero que le permitirá recuperar la inversión que hizo al comprarlo al PSV Eindhoven en unos 15 millones de dólares en el 2008.
Comunicado oficial de @s04 pic.twitter.com/VNZDUY6jCT— Airon Nelson (@AironNelson) julio 20, 2015
¿Por qué Farfán no escoge una liga de similar competencia a la alemana a sus 30 años? La respuesta solo la tiene el jugador. Pero hay algunos indicios. Jefferson viene de una lesión muy complicada a la rodilla que lo llevó a perder un año de juego entre el 2014 y 2015 y ello amerita constante vigilancia médica y cuidados para que siga en actividad profesional.
Quizá para sostenerse en la élite del fútbol en la que se desarrollaba Farfán, no alcance la recomendación médica. Tal vez la decisión que venga tomando sea la más inteligente dada la coyuntura que vive. No es posible comparar su carrera con la de Claudio Pizarro o Paolo Guerrero porque cada uno tuvo características, circunstancias y oportunidades diferentes. Pero claramente la 'Foquita' cuenta con un asesor -Raúl Gonzales- que entiende el punto de quiebre de su jugador y trata de preservar la tranquilidad económica en un mercado como el árabe que cuenta con comodidades y la exigencia deportiva no tiene rigor.
¿Volver al fútbol peruano? Hace años Farfán expresaba el deseo de retirarse en Alianza Lima e incluso en charlas informales con amigos como Paolo Guerrero y Rinaldo Cruzado habían planificado vestirse de blanquiazules en el 2017, pero como bien dicen: el hombre propone y Dios dispone.
Jefferson tendrá que pasar unas pruebas médicas en Arabia antes de estampar su firma y de superar dichos exámenes podrá sentirse tranquilo de que el fútbol ha sido generoso. ¿Y la selección peruana? Ese es otro cantar.